BURGOS, 4 Ago. (EUROPA PRESS) -
El presidente de la Diputación de Burgos, César Rico, ha pedido este viernes ir "paso a paso" en todo lo relativo al futuro de la central nuclear de Santa María de Garoña, después de que el pasado día 1 el Gobierno central confirmase su intención de no autorizar la renovación de la concesión de la planta.
Rico ha señalado, en declaraciones recogidas por Europa Press, que es necesario esperar para ver cómo evoluciona todo el proceso del desmantelamiento de la central y ha insistido en que, ahora, es imprescindible ver qué pasa con el dinero que los municipios dejarán de percibir por su cierre.
En este sentido, ha recordado que todos los ayuntamientos que se encuentran dentro de la zona de actuación del Plan de Emergencia Nuclear de Burgos (PENBUR) perciben un dinero por encontrarse en ese entorno a través del Estado y ha insistido en que dicho dinero "les hace falta".
En cuanto a las alternativas laborales para la zona, el presidente de la Diputación de Burgos ha señalado que son "muy complicadas" porque "no va a venir al día siguiente una fábrica de coches o camiones al día siguiente que equivalga a los mil puestos de trabajo". "Es muy complejo", ha añadido.
Al respecto, César Rico ha remarcado que el empleo que generaba Garoña era de calidad y ha destacado que a partir de ahora, para su desmantelamiento, se precisarán sólo unas 300 personas de toda su plantilla.
El presidente de la Diputación de Burgos también ha recordado en su intervención al expresidente del Gobierno, el socialista José Luis Rodríguez Zapatero, para señalar que tras anunciar su decisión de cierre de la central burgalesa prometió inversiones, como el desdoblamiento de la N-I y la creación de un Parador Nacional en la zona, que nunca llegaron a materializarse.