BURGOS, 15 Ago. (EUROPA PRESS) -
En 1936, Prudencio Unanue Ortiz, un emigrante español natural de la localidad burgalesa de Villasana de Mena, abría en la calle Duane del sur de Manhattan, en Nueva York, una pequeña tienda llamada 'Unanue & Sons' (Unanue e hijos) que sería el origen de un gigante de la alimentación latina en Estados Unidos bajo el nombre de Goya Foods.
El nombre de la compañía se ha visto afectado en las últimas semanas por una propuesta de boicot por parte de algunos opositores al presidente Donald Trump después de que el actual director general de Goya Foods, Robert Unanue, pronunciara palabras de halago para el mandatario durante un acto en la Casa Blanca y tras el que el propio presidente apareciera junto a productos de la firma para mostrarle su apoyo.
Robert Unanue, una de las mayores fortunas latinas de Estados Unidos y que ostenta doble nacionalidad española y norteamericana, es nieto de Prudencio, el burgalés nacido en el Valle de Mena en 1886 y que dejó España para emigrar a Puerto Rico con sólo diecisiete años, muy poco tiempo después de que la guerra hispano-estadounidense propiciara el cambio de soberanía de la isla, que de provincia española con una recién estrenada Carta Autonómica pasó a ser un territorio no incorporado norteamericano.
Prudencio se estableció en el municipio portorriqueño de San Lorenzo, donde estableció un pequeño negocio de distribución alimentaria. En Puerto Rico conoció a la que se convertiría en su esposa, Carolina Casal de Valdés, también de origen español, en este caso pontevedrés.
En 1918, Prudencio dejó Puerto Rico para viajar a Nueva York, donde estudió en la Escuela de Negocios de la Universidad de Albany hasta su regreso a la isla en 1921. En ella contrajo matrimonio y allí nacería su primer hijo, Charles, pero poco después la familia regresó a orillas del río Hudson.
En 1936, la familia Unanue abrió su primer comercio en la calle Duane del bajo Manhattan, en el actual barrio de Tribeca, en el cual abastecía de alimentos frescos procedentes de la península ibérica a la importante colonia de emigrantes españoles que alojaba Nueva York por aquel entonces.
Entre estos productos destacaban las aceitunas, el aceite de oliva o incluso las sardinas, productos poco consumidos por los norteamericanos y, por lo tanto, no tan frecuentes en los mercados neoyorquinos.
EXPANSIÓN DEL NEGOCIO
El éxito de esta tienda, que la famosa escritora María Dueñas menciona en su novela 'Las hijas del Capitán', llevó al burgalés a ampliar el negocio décadas después con nuevas instalaciones en Brooklyn y nuevas líneas de productos de todo el espectro latino a medida que crecía la presencia de inmigrantes de Hispanoamérica en la Gran Manzana.
La empresa cambió su nombre, 'Unanue & Sons', por el de Goya Foods, que compró por un dólar a una empresa de sardinas marroquíes y que resultaba, además de un guiño a la cultura española, más fácil de recordar para el cliente que el apellido familiar.
A finales de la década de los 60, Prudencio Unanue cedió el testigo a sus hijos, primero Charles y luego Joseph, mientras que otro de sus vástagos, Frank, dirigió la división de la compañía en Puerto Rico y fue uno de los fundadores de la Cámara de Comercio España-EEUU en Nueva York.
Prudencio Unanue Ortiz murió en 1976, dos años después de que la firma siguiera su proceso de crecimiento con la apertura de su nueva sede central en Nueva Jersey. En 1973 otro de sus hijos, Anthony, promovió la compra de una fábrica de aceite en Alcalá de Guadaíra (Sevilla), lo que supuso la vuelta de los Unanue a España.
Fruto de esto, el hijo de Anthony, Robert, estudió en la Universidad de Sevilla y adoptó la nacionalidad española, junto con la estadounidense. Desde 2004 Robert dirige el grupo Goya, mientras que su hijo Bill se encuentra al cargo de Goya Nativo, la división en España de esta multinacional latina.
Actualmente Goya Foods cuenta con centros de distribución y fabricación en Texas, California, Georgia y Nueva Jersey en Estados Unidos, así como en Puerto Rico, República Dominicana y España, hasta un total de 26 instalaciones y más de 4.000 empleados.