Puente ve a Igea "obsesionado" con impedir actividades en Valladolid

   Acusa a la Junta de "no cumplir con su trabajo" y tratar de solucionarlo "restringiendo actividades en perjuicio de terceros"

   VALLADOLID, 2 Sep. (EUROPA PRESS) -

   El alcalde de Valladolid, Óscar Puente, ha acusado al vicepresidente de la Junta de Castilla y León, Francisco Igea, de "estar obsesionado" con impedir que en la capital haya actividades alternativas a las fiestas que fueron canceladas por la pandemia de coronavirus "sin importar las medidas de seguridad" implementadas para ello, en muchos casos "tan extremas" como las desarrolladas durante la pasada celebración del Festival de Teatro y Artes de Calles (TAC).

   En una rueda de prensa convocada este miércoles para explicar el recurso que el Consistorio presentará ante la Justicia a fin de impedir que las nuevas restricciones de aforo aprobadas el martes por el Consejo de Gobierno de la Junta de Castilla y León, Puente se ha preguntado "si es verdad que la cosa está tan mal" en Valladolid y Salamanca, los dos municipios afectados por estas nuevas restricciones, por qué el Ejecutivo autonómico no se plantea retrasar el inicio del curso escolar como van a hacer "otras comunidades con mejores tasas de contagios".

   En este sentido, ha criticado la "incoherencia" que, a su juicio, supone imponer un aforo máximo de 25 personas para un concierto en un espacio como el Pabellón Pisuerga --donde habitualmente pueden reunirse hasta 7.000 personas-- mientras se pretende reunir "a 25 alumnos en aulas de 30 metros cuadrados".

   Aunque ha evitado valorar la seguridad con que se iniciará el curso escolar, el primer edil sí ha asegurado que "el mensaje que se envía a los padres es poco tranquilizador" y considera que los miembros de la Junta "no lo han pensado".

   Acompañado por su equipo de Gobierno al completo --de coalición entre PSOE y Valladolid Toma la Palabra--, Óscar Puente ha subrayado el "perjuicio" que estas medidas provocan a un sector "tan dañado" como el de la cultura y ha cargado contra la "falta de lealtad institucional" y el "nulo diálogo" a la hora de adoptar unas decisiones que "bajo la etiqueta loable de la defensa de la salud pública" resultan "muchas veces injustas, incoherentes y que vulneran el ordenamiento jurídico".

   Así, el regidor ha defendido las medidas de seguridad contempladas para las actividades programadas desde este viernes y durante los próximos diez días --cuando se hubieran debido de celebrar la Feria y Fiestas de Nuestra Señora de San Lorenzo-- y ha confirmado que los servicios jurídicos del Consistorio trabajan en un recurso para pedir medidas cautelarísimas que permitan su celebración, en tanto se ha suspendido la entrega de invitaciones y venta de entradas en espacios como el Teatro Calderón.

"ABUSO DE PODER"

   El alcalde ha lamentado el "abuso de poder" ejercido por la Junta y ha advertido de que "lo que no se puede" es que esta Administración "no cumpla con su trabajo y quiera solucionar los problemas restringiendo actividades en perjuicio de terceros".

   En este sentido, ha cargado contra el Gobierno de la Comunidad por "no contratar rastreadores" y no permitir consultas presenciales en los consultorios médicos mientras permite que "se le escapen la mitad de los médicos residentes" y pretender resolver su "falta de capacidad" con las actividades "de terceros".

   Óscar Puente ha asegurado que este recurso no se vería afectado por el cambio normativo en el que trabaja el Gobierno de España para agilizar la adopción de medidas restrictivas por parte de las comunidades autónomas, ya que se limitaría a delegar las decisiones judiciales en los tribunales superiores de Justicia, pero no sustrae el papel de los jueves, lo cual sólo se puede hacer a través del estado de alarma.

   En este sentido, ha recordado que las comunidades "pueden pedir" la declaración de esta figura en su territorio aunque ha vaticinado que "ninguna" gobernada por el PP "lo va a pedir aunque lo necesite" por "supeditar sus intereses a la estrategia política" del líder de los 'populares', Pablo Casado.

   "No creo que las razones sanitarias estén detrás de estas medidas", ha sentenciado el primer edil, cuyo primer teniente de alcalde, Manuel Saravia, ha negado que la Junta le informara de estas medidas como afirmó el presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco.

   El alcalde, sobre este punto, ha precisado que el Ayuntamiento fue informado "cinco minutos antes" de la rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno, a lo que siguió "una llamada de cortesía" de la consejera de Sanidad, Verónica Casado, por la tarde, pero "sin permitir ningún tipo de aportación", al tiempo que ha tachado de "osadía" la afirmación de Mañueco de que se había comunicado al Consistorio.

MEDIDAS "DE TRAZO GRUESO"

   Por su parte, Manuel Saravia ha abogado por medidas de prevención más precisas y no "de trazo grueso" como las adoptadas, a su juicio, por el Ejecutivo autonómico, ya que la situación en septiembre "no es la misma que en marzo o abril", al tiempo que ha rechazado que se actúe "sin diálogo".

   Óscar Puente ha afirmado que a Francisco Igea "se le ha olvidado que en Valladolid no hay ferias" y que estas medidas se han dejado fuera actividades como el Mercado Castellano, el cual está considerado como una "actividad comercial".

   Además, se ha cuestionado la efectividad de estas medidas cuando los vallisoletanos pueden acudir sin esos límites de aforo a centros comerciales y conciertos de localidades vecinas como Arroyo de la Encomienda y Zaratán.

   En este sentido, se ha referido también a la cantidad de viajeros que se mueven diariamente en trenes "sin separación entre personas" a Madrid, a la que se ha referido como "el mayor foco de contagios de Europa".

   También ha aludido el alcalde a la situación en los hospitales de la ciudad, que en proporción a la población ve "similar" a otras ciudades de Castilla y León.

   Los programas de Vallatarde y Vallanoche también podrían verse afectados por estas medidas, como ha reconocido el alcalde, quien ha recordado que precisamente éstos suponían una alternativa "saludable" a los botellones relacionados con focos de contagio.