CyL acusa a Ribera de reducir fondos para los daños del lobo y de falta de consenso en incendios

Actualizado: miércoles, 24 julio 2024 18:12

VALLADOLID 24 Jul. (EUROPA PRESS) -

El consejero de Medio Ambiente, Vivienda y Ordenación del Territorio, Juan Carlos Suárez-Quiñones, ha mostrado este miércoles su malestar ante el Ministerio del ramo con motivo de la reducción de fondos para la gestión del lobo ibérico, la conservación y restauración de la biodiversidad y las Áreas de Influencia Socioeconómica (AIS) de Parques Nacional, que en este último caso quedan reducidas a la mitad.

También ha mostrado su disconformidad, por falta de un mayor consenso, respecto del borrador de Real Decreto por el que se aprueban las directrices y criterios comunes de los planes anuales para la prevención, vigilancia y extinción de incendios forestales.

Así se lo ha trasladado al ministerio del ramo el consejero castellanoleonés durante la Conferencia Sectorial celebrada este miércoles por videoconferencia y presidida por la vicepresidenta del Gobierno y ministra, Teresa Ribera.

En dicho encuentro se ha ratificado un reparto territorial de 481,1 millones de euros para diversas inversiones destinadas a la conservación y la restauración de la biodiversidad, acciones de lucha contra el cambio climático, a la implementación de la normativa de residuos o al programa de economía circular. De esta cuantía, 42.442.469 euros han correspondido a Castilla y León, según los criterios acordados para su territorialización.

En la reunión de este órgano de coordinación entre el MITECO y las comunidades autónomas, se han validado los acuerdos aprobados previamente en Consejo de Ministros, que canalizan fondos del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia (PRTR) para el ejercicio presupuestario 2024 en el ámbito de la transición ecológica.

El total de fondos territorializados se distribuye en distintos acuerdos, de los que se han asignado a Castilla y León: PIMA eventos adversos (800.000 euros); PERTE digitalización ciclo del agua (8.637.600 euros); Plan de aplicación de la normativa de residuos: proyectos estratégicos (20.154.499,85 euros) y digitalización (2.823.832,41 euros); actuaciones de conservación y restauración de la biodiversidad--en el caso de Castilla y León, para la conservación del urogallo y del visón europeo--(1.060.137,49 euros); lobo ibérico, medidas preventivas e indemnizaciones por daños (8.707.839 euros, de ellos 4.920.780 para el primer capítulo y otros 3.787.059,00 para el segundo), y áreas de influencia socioeconómica (AIS) de parques nacionales (258.560 euros).

En lo referente a los últimos tres puntos, el consejero ha denunciado que el cambio de criterio respecto de las conferencias sectoriales de años anteriores motiva que, aunque las asignaciones iniciales resulten sensiblemente parecidas, las transferencias finales se alejen mucho de las habituales para el caso de Castilla y León, ya que en el caso de las AIS, por ejemplo, se reducen a la mitad.

Esto es debido al diferente tratamiento dado a los remanentes de años anteriores o procedentes de cantidades no justificadas de las asignadas a otras comunidades, de las que Castilla y León se beneficia al justificar todas las actuaciones y obtener, por ello, esos fondos suplementarios. Esto, como ha denunciado el consejero, supone una merma considerable en los fondos a percibir por el conjunto de las comunidades autónomas y, en concreto, por Castilla y León.

En el caso de Castilla y León, la repercusión de este cambio de criterio lo consider más grave, toda vez que los fondos del lobo que se acordaron en 2022 no fueron transferidos de forma efectiva a esta Comunidad hasta el 2023, lo que hace imposible justificar el gasto en 2022, cuestión que ha trasladado el Gobierno autonómico.

PÉRDIDA DE MÁS DE DIEZ MILLONES

A eso se suma el hecho de que las asignaciones correspondientes a 2023 en estas tres áreas no llegaron a materializarse, ya que, aunque fueron aprobadas en otra Conferencia Sectorial ese año, finalmente no fueron fiscalizadas de conformidad por el propio Ministerio y, por tanto, se perdieron, lo que ha supuesto una pérdida de fondos asignados previamente a Castilla y León de más de 10,5 millones de euros.

Además, aunque el secretario de Estado de Medio Ambiente se había comprometido a acumular en 2024 las cantidades no asignadas en el 2023, Suárez-Quiñones asegura que no ha sido así. Pese a que este año hay una nueva asignación, entiende que ello no cubre el importe previsto el año pasado, que no se llegó a transferir; ni lo que era imposible de justificar de 2022 al llegar los fondos en 2023, por lo que el consejero ha demandado una compensación al alza en los fondos asignados, aunque se produzca en otro momento dentro de 2024.

Además, se han adoptado acuerdos que aprueban diversas estrategias, planes o directrices. De los que afectan a Castilla y León, cabe destacar el Plan Nacional de Conservación de Recursos Genéticos Forestales; el Plan Nacional de Mejora Genética Forestal; las Directrices de Conservación de la Red Natura 2000 y las de conservación ex situ de la flora silvestre la Estrategia de gestión, control y posible erradicación de las especies exóticas invasoras presentes en medios acuáticos continentales; la de lucha contra el uso ilegal de cebos envenenados; la de desfragmentación de hábitats afectados por infraestructuras lineales de transporte, o las conservación del cangrejo de río ibérico o el lince ibérico.

Castilla y León ha mostrado su parecer favorable en todos los casos, habiendo colaborado de forma activa en los diferentes comités técnicos y grupos de trabajo. También ha apoyado la propuesta de declaración de situación crítica del desmán en España.

Se ha presentado también información de los proyectos de reales decretos derivados del Real Decreto-ley 15/2022, de 1 de agosto, por el que se adoptan medidas urgentes en materia de incendios forestales; en concreto, el borrador de Real Decreto por el que se desarrollan medidas de coordinación instrumental para la prevención, vigilancia y extinción de los incendios forestales y el borrador de Real Decreto por el que se aprueban las directrices y criterios comunes de los planes anuales para la prevención, vigilancia y extinción de incendios forestales.

Sobre el primero de ellos Castilla y León ha mostrado un parecer favorable, pero en el segundo ha demandado un mayor consenso que no se ha producido hasta la fecha, tanto en la forma de tramitación, que debería haber sido más clara, transparente y garantista en los comités previos y en la posibilidad de participar las autonomías, como en el fondo de las cuestiones abordadas.

En ese sentido, el consejero ha recalcado la necesidad de que en estos importantes instrumentos se alcance un elevado grado de consenso por parte de las comunidades, que son las competentes en su aplicación, y ha demandado la búsqueda de ese consenso para que el resultado sea el mejor técnicamente posible y pueda lograr una aplicación más efectiva, comprometiéndose la vicepresidenta y ministra a promover un trámite en las próximas semanas para hacer posible esa participación.