VALLADOLID 29 May. (EUROPA PRESS) -
El Real Valladolid regresa a Primera División un año después de que perdiera la categoría al ganar al Huesca (3-0) y que el Eibar no pudiera ganar en Alcorcón.
Los blanquivioleta llegaban a esta última jornada fuera de los puestos de ascenso directo y dependiendo de los resultados que vascos y andaluces, hasta hoy empatados a 80 puntos, consiguieran en Alcorcón y Leganés, respectivamente.
Con la victoria de los de José Martín Rojo 'Pacheta' esta noche ante el Huesca y el tropezón del conjunto armero, el Real Valladolid ha conseguido uno de esos dos puestos de ascenso que se disputaban en esta última jornada de la Liga SmartBank.
El gol de Weissman en el 47 abría la puerta al 'milagro'. Un tanto que desatascaba un partido trabado en la primera parte y que pellizcaba a la afición blanquivioleta que empezaba a creer que el sueño podía hacerse realidad. Cinco minutos después Gonzalo Plata ponía tierra de por medio y Aguado, ya en el minuto 79, dejaban sentenciado el partido en Zorrilla y todas las miradas se dirigían a lo que sucedían en Butarque y en el Municipal de Santo Domingo.
Los de Pacheta no tuvieron un buen inicio de competición. Es verdad que de los 9 primeros puntos en liza sumó siete, pero, a partir de ahí, tres derrotas consecutivas --Burgos, Tenerife y Girona-- provocaron las primeras dudas en la afición blanquivioleta.
No obstante, el equipo, que solo había ocupado puestos de ascenso directo en la jornada 3 después del partido frente al Lugo, siempre se movió en terrenos de play off hasta la jornada 23, después de la victoria frente al Burgos. Puestos en los que se movió hasta la jornada 25. A partir de ahí, y hasta la victoria de nuevo frente al Lugo, esta vez en Zorrilla en la jornada 34, los vallisoletanos intercambiaron puestos entre los seis primeros de la tabla.
A partir de esa jornada, los de Pacheta siempre han tenido que mirar a otros estadios, si bien no perdían sus opciones de ascenso directo. Un objetivo que se torció con la derrota ante la Real Sociedad B en casa y en las vísperas del que, a priori, iba a ser decisivo partido en Ipurúa.
Mientras, Eibar y Almería hacían los deberes y ganaban sus partidos. Así, sin depender de sus resultados, los de Pacheta se midieron al Eibar. El 0-2 volvía a despertar las ilusiones blanquivioleta, que hicieron los deberes frente a Ponferradia e Ibiza. Los armeros, se recuperaron del traspié en casa y sumaba seis puntos en las siguientes dos jornadas con una victoria agónica frente al Leganés y otra más cómoda en casa ante el Tenerife. Por su parte, los andaluces ganaban a la Real Sociedad B, pero empataban en casa ante el colista Alcorcón.
A est última jornada Eibar y Almería ocupaban los puestos de ascenso directo con 80 puntos, dos más que los blanquivioleta y dependiendo de ellos mismos para regresar a Primera División.
Sin embargo, hoy se dieron todos los condicionantes para que el Real Valladolid consiguiera regresar a la categoría de Oro del fútbol español. Lo ha hecho por la vía rápida, sin tener que recurrir a los play off a los que parecía condenado tras la derrota en casa ante la Real Sociedad B.
Con el pitido del árbitro la fiesta se desató en el estadio vallisoletano. Una celebración que recordó a la del último ascenso, el 16 de junio de 2018 con aquel gol de Mata en los play off que certificaba un ascenso ante el Numancia que ya habían encarrilado los de Sergio González en Los Pajaritos.