LEÓN, 6, (EUROPA PRESS)
Las selecciones de Ribera y Montaña volverán a enfrentarse este sábado en la localidad de Puebla de Lillo (León) en el tradicional corro de lucha leonesa que pone fin a la temporada deportiva.
Se trata de la trigésima edición de una competición que reunirá a los mejores luchadores de cada zona desde las categorías de prebenjamín hasta senior en un enfrentamiento que hasta la fecha gana la Montaña por 18 victorias frente a las 11 conseguidas por las localidades de la Ribera.
El trazado que delimita el origen de los 46 contendientes por cada equipo lo marca la línea de FEVE León-Guardo a su paso por la provincia. Luchadores de Cistierna, Boñar, Prioro, Morgovejo, Riaño, La Robla o Puebla de Lillo defenderán las nueve victorias consecutivas que ha obtenido la montaña. Participantes de Valdefresno, San Cipriano del Condado, Gradefes, Lorenzana, Arcahueja o Montejos del Camino tratarán de cambiar las tornas.
El evento que se celebrará este sábado 9 de noviembre a las 17.30 horas en el Pabellón de Deportes de Puebla de Lillo, ha sido presentado este miércoles en la sede de la Diputación de León por la diputada de Deportes de la institución provincial, Patricia Martínez, el teniente alcalde de Puebla de Lillo, Teodomiro Fernández, el presidente de la Federación de Lucha Leonesa, Ángel Rivero, y los seleccionadores de ambos equipos.
La representante de Diputación ha destacado esta iniciativa como "la competición señera de la lucha leonesa" y "el corro que despierta más pasiones en el calendario luchístico" en el que los aficionados "vuelcan su pasión por uno de los dos lados".
Martínez ha deseado que "el gallo y el mazapán" --simbólicos trofeos para los triunfadores-- caigan del lado de los mejores en "la gran fiesta de la lucha leonesa", un deporte que cuenta con "el total apoyo" del Área encarga dentro del órgano de Gobierno provincial.
CELEBRACIÓN DEL DEPORTE LEONÉS
El presidente de la Federación deportiva ha señalado que la lucha leonesa "tiene todos los atractivos como deporte leonés" que son "las raíces culturales y la identificación con nuestra provincia".
Rivero ha anunciado que este año aumenta la participación de luchadoras femeninas pasando de la presencia de una por equipo en la edición anterior a las tres que competirán en la próxima cita.
También ha subrayado el esfuerzo de los seleccionadores --Omar Riquete en representación de los ribereños y Sergio González en representación de los montañeses-- y el "sentimentalismo" con el que aficionados y contendientes se entregan con sus respectivos equipos.
Por su parte el seleccionador de la Montaña ha remarcado la "excelente" generación de luchadores que militan en sus filas y ha reivindicado la iniciativa como un cierre de temporada "sin rivalidad" y como "una fiesta de unidad y sentimiento de pertenencia a León".
Finalmente el adiestrador de la Ribera ha expresado su deseo de "paliar la sangría" de los últimos años, en referencia a las nueve derrotas seguidas de su cuadro, a la par que ha considerado la ocasión como "un momento especial para poder unir a todos los clubes de León".