VALLADOLID, 16 Oct. (EUROPA PRESS) -
El sector de la construcción espera poner en marcha a finales de 2023 un plan de pensiones sectorial con el que atraer talanto y "salvar el futuro de la gente que está en el sector" con esta ayuda en el caso de que la seguridad social no sea capaz de atender toda la demanda.
Así lo ha explicado en declaraciones a los medios el secretario general de la patronal nacional de la Construcción (CNC), Mariano Sanz Loriente, antes de participar en la presentación de la guía práctica de aplicación del nuevo Plan de Pensiones del Sector de la Construcción.
La iniciativa ya se ha convenido en el séptimo convenio del sector, que se aprobó a principios de septiembre, y los pasos a seguir ahora es nombrar una entidad gestora y luego una comisión de control para que controle todas las inversiones, montar el fondo de pensiones: "Nos gustaría que a final de año tuviéramos buenas noticias. En dos, tres meses debíamos tener ya algo rodando".
Sanz Loriente ha señalado que el plan se nutre de aportaciones que hacen de su propio salario los trabajadores mensualmente y que "podrán recoger con toda seguridad en el futuro cuando se jubilen". "Eso es una medida más de todo lo que estamos intentando pues para beneficiar al sector en el que si nos sentimos muy pioneros en muchas cosas, particularmente en las relaciones laborales que tenemos con los sindicatos", ha detallado.
Se trata del primer plan de pensiones sectorial que, tal y como ha apuntado, "puede llegar a afectar hasta 1,4 millones de trabajadores" y funcionaría como "un salario en especie que reciben que se lo detraen del incremento salarial que tenían pactado". "Por ejemplo, en el año 2022 el incremento pactado en tablas es un 4 por ciento, de los cuales el 3 por ciento se destina al incremento real en tablas y ese 1 por ciento lo aporta como contribución al plan de pensiones individual de cada uno de los trabajadores", explicado.
En cuanto al ahorro, Sanz Loriente ha señalado que como la medida va vinculada a tablas, puede estar "entre los 250 y 300 euros" anuales por trabajador, a la par que ha asegurado que "cada vez el volumen va a ser más importante".
Ha aseverado que están siendo "muy rigurosos" para que "nada pueda salir mal en ningún momento": "Sí, insisto que nosotros estamos yendo muy despacito y con mucha seguridad. Lo primero que necesitábamos era que se aprobara el séptimo convenio".
"ESPEREMOS QUE SEA SUFICIENTE PARA ATRAER TALENTO"
Por su parte, el presidente provincial de CNC, Alberto López Soto, considera que esta medida es "un avance para generar ahorro y para favorecer a todos los trabajadores" del sector de la construcción y confía en que sea una palanca para "atraer talento" ya que no hay otro sector que tenga incorporado un plan de pensiones y los trabajadores "van a poder disfrutar de esta ventaja". "Esperemos que sea suficiente para atraer talento", ha recalcado.
Preguntado por una radiografía del sector, ha hecho alusión a la falta de trabajadores --400.000 en toda España-- que en Valladolid "también se nota". "A veces se quitan profesionales, se retiran de una obra para terminar otra y bueno, pues tenemos en este país un problema social porque a la gente le cuesta mucho trabajar en este sector ", ha enfatizado.
En este sentido, ha apuntado que se trata de un problema "social" y lamenta que el sector esté "estigmatizado" cuando es "atractivo" y tienes "una remuneración bastante razonable, por encima de los demás y con trabajo a largo plazo también", además de con "estabilidad, formación". Ahora tiene "dificultades" ante el envejecimiento de la población y, por ello, ha reclamado que se "difundan" los mecanismos que ofrecen.
En otra clave, en cuanto a las licencias en el Ayuntamiento, el presidente provincial ha señalado que "siempre hay un poco de retraso", pero "no es la época de más retraso". "El ayuntamiento está funcionando razonablemente", ha zanjado en este sentido.