PALENCIA, 25 Mar. (EUROPA PRESS) -
La Semana Santa de Palencia, declarada de Interés Turístico Internacional en 2012, es la "solemidad y rigurosidad" por escelencia en el que toda una ciudad se vuelca en cada uno de los desfiles procesionales, ya que todas y cada una de las nueve cofradías palentinas participa en todas las procesiones programadas. Se trata de una peculiaridad que obliga a no perderse la Semana Santa de Palencia por varias razones:
1.- Cinco siglos de antigüedad
2.- Las nueve cofradías desfilan en cada una de las procesiones programadas.
3.- El sonido del 'Tararú', una trompeta larga que marca el ritmo del desfile y que puede sonar ininterrumpidamente hasta un minuto.
4.- El saludo de los estandartes que se inclinan, en señal de respeto, ante los estandartes de otras cofradías y a la salida de los pasos.
5.- La llamada de los hermanos. Un grupo de cofrades, la madrugada del Jueves Santo, llama a la puerta de otros hermanos con tres toques de vara y el sonido del 'tararú' para avisar de la procesión.
6.- La colación. El premio que reciben los cofrades el Domingo de Resurrección por su penitencia y esfuerzo y que consiste en pan de anis y limonada.
7.- Silencio, solemnidad y sobriedad.