El juicio se celebrará en la Audiencia Provincial los días 21 y 22 de febrero
VALLADOLID, 12 Feb. (EUROPA PRESS) -
Fiscalía de Valladolid solicita una condena de cinco años y medio de cárcel para un entrenador de fútbol sala, D.P. de L, que en febrero de 2016 fue detenido por la Policía Nacional por presunto delito de abusos sexuales sobre menores, a los que, supuestamente, mandaba 'whatsapps' con conversaciones subidas de tono y, en algunos casos, besó y abrazó cuando pasaban la noche en su domicilio.
El juicio se celebrará los días 21 y 22 de febrero en la Sección Cuarta de lo Penal de la Audiencia provincial, donde, con carácter provisional, la acusación pública acudirá con una calificación que incluye un delito continuado de abuso sexual a menores de 16 años petición de cinco años y medio de prisión y otro delito continuado de proposición de encuentro con fines sexuales por medios tecnológicos, según informaron a Europa Press fuentes jurídicas.
Amén de la citada pena privativa de libertad de cinco años y medio, el fiscal del caso solicita la inhabilitación del procesado para la actividad de entrenador de fútbol o deportivo respecto a menores durante cuatro años una vez cumplida la condena, así como otras prohibiciones de aproximación y comunicación con sus víctimas.
El arresto de D.P. de L. se produjo el 23 de febrero del pasado año, después de que la madre un chico, menor de edad y que había sido entrenado en el pasado por el presunto pederasta, denunciase los supuestos hechos en la Comisaría de Las Delicias tres días antes, en concreto que la víctima estaba recibiendo desde finales del mes de enero mensajes de alto contenido sexual y obsceno.
El caso se puso en manos de la Unidad de Familia y Mujer (UFAM) de la Brigada de Policía Judicial, que se hizo cargo de esta investigación, efectuó un registro en su vivienda y requisó tanto su ordenador, un disco duro y un teléfono móvil para su análisis correspondiente. Los agentes pudieron comprobar que habría otros menores en la misma situación.
El acusado, de 27 años y origen argentino, durante el segundo semestre de 2015 y primeros meses de 2016, aprovechando su condición de entrenador de fútbol 11 y fútbol sala de categorías infantiles (Betis CF y el Valladolid Fútbol Sala), mantenía contactos con menores, con algunos de los cuales tenía conversaciones impropias de la normal relación mayor-menor, siempre según la tesis de la acusación pública.
SOLICITUD DE FOTOS A LOS MENORES
Al tiempo, efectuaba proposiciones y solicitudes de envío de material fotográfico de los menores parcialmente vestidos, que conservaba archivadas en su móvil.
Al menos constan los 'whatsapps' enviados a cuatro menores en los que además de interrogarles sobre supuestas relaciones sexuales que hubieran tenido con chicas y pedirles detalles de las mismas, también solicitaba la aportación de fotos con el torso al aire mostrando la "tableta" y les proponía comerles a besos y abrazos pues sólo les quería para él.
En el relato de hechos imputados al exentrenador se incluye la invitación que hacía a los menores para que acudieran a su domicilio para jugar a la 'play', a algunos de los cuales, presuntamente, besaba, abrazaba y tocaba la pierna aprovechando que éstos se quedaban a pernoctar allí, "sin que conste la realización de otras conductas de abuso o agresión más allá de las reseñadas".