VALLADOLID, 3 Ene. (EUROPA PRESS) -
El sindicato UGT en Castilla y León se ha felicitado por la caída del paro en la Comunidad en diciembre en 868 personas, situando la cifra total de parados en 162.988, si bien ha criticado la temporalidad y precariedad del empleo creado, ya que que cuatro de cada diez contratos son temporales a tiempo parcial.
Para el sindicato que dirige Faustino Temprano es preciso reponer los derechos laborales de la clase trabajadora empezando por la derogación de la reforma laboral de 2012, con la que, a su juicio, solo se ha conseguido degradar las condiciones laborales.
UGT, a través de un comunicado recogido por Europa Press, ve también imprescindible impulsar la demanda para afianzar el crecimiento económico y esto pasa por un crecimiento de las rentas del trabajo, desde los salarios hasta las pensiones. Además, apuesta por un cambio del modelo productivo para generar empleos de calidad.
Y es que, como así insiste el sindicato, la precarización laboral es mayor en Castilla y León que en el conjunto del país: "Tenemos mayor porcentaje de temporales, mayor porcentaje de contratos de escasísima duración y un mayor porcentaje de contratos doblemente precarios".
Denuncia que la precarización también afecta a las personas en desempleo (los datos siempre son del mes anterior). El 54,5% (89.356) de los parados carecen de cobertura. Además, de los que perciben algún tipo de prestación, 40.241 lo hacen vía subsidio, renta activa de inserción o programa de activación, frente a los 34.259 que perciben una prestación contributiva.
"Esto implica que la prestación media es cada vez menor. El paro se está cronificando para muchos trabajadores. El 36% de los parados de Castilla y León lleva más de dos años en esa situación y el 20% más de cuatro años, según la última EPA", advierte UGT, quien añade que tenemos los mismos problemas que en el conjunto de España, "pero en Castilla y León son más intensos".
Ante ello, de cara a 2018 Temprano reclama un verdadero plan de choque para el empleo, garantizando la protección social y reforzando las prestaciones por desempleo, junto a políticas activas de empleo, desde el ámbito público.