VALLADOLID, 27 Mar. (EUROPA PRESS) -
El presidente de la Fundación Fermín Carnero, Agustín Prieto; el presidente del CES de Castilla y León, German Barrios, y el consejero de Empleo, Carlos Fernández Carriedo, han coincidido este lunes al abogar por un Brexit "blando" o "dialogado" para minimizar al máximo los efectos de la salida del Reino Unido de la Unión Europea, un proceso que se notificará de forma oficial el próximo miércoles.
Este es el principal mensaje que han lanzado Prieto, Barrios y Fernández Carriedo en su intervención este lunes en una jornada sobre 'El impacto del Brexit en el mercado de trabajo, incertidumbres y retos' organizada por la Fundación Fermín Carnero y El Norte de Castilla y que ha contado con la participación de expertos en relaciones laborales y de los sindicatos CCOO y UGT, con sus líderes, Ignacio Fernández Toxo y Pepe Álvarez, a la cabeza.
Tras recordar que se trata de un proceso "totalmente novedoso" y sin precedentes en la UE que abrirá "una nueva etapa de desafíos" para el conjunto de la Unión Europea, los intervinientes han insistido en la conveniencia de ese Brexit "blando" y no "duro" que reconozca el 'statu quo' de los trabajadores, un asunto "de vital importancia" --en palabras de Prieto-- para los asalariados.
"El Brexit está ahí, es una realidad y como tal habrá que afrontarlo", ha asumido por su parte el consejero de Empleo, quien ha hecho un llamamiento al diálogo y a la negociación con la confianza de que el proceso que se iniciará el próximo miércoles se lleve a cabo "de la mejor manera y de la forma menos perjudicial" tanto para el Reino Unido como para el conjunto de países que permanecen en la UE para que tenga éxito y se pueda "capear el temporal, por adverso que sea".
Los intervinientes han advertido de las consecuencias que supondrá la salida del Reino Unido para la economía de Castilla y León y han expresado sus incertidumbres respecto a sectores como el turístico ante el progresivo incremento de viajeros británicos a la comunidad castellanoleonesa que el pasado año recibió a 203.636 ciudadanos británicos, cerca del 13 por ciento del total de visitantes extranjeros.
Según han apuntado, la salida del Brexit hace prever una disminución de la renta de los británicos que podría incidir a su vez en las comunidades autónomas, como es el caso de Castilla y León que no tiene un turismo de sol y playa.
Otros de los efectos de la salida del Brexit pasan por una previsible reducción de la inversión extranjera directa en Castilla y León donde Reino Unido es "el principal inversor" desde el año 2008 con 110 millones acumulados hasta mediados de 2016, un 14,4 por ciento del total de la inversión extranjera en la Comunidad.
Además, ha detallado Fernández Carriedo, Reino Unido es el principal destino de la inversión productiva española con 8.601 millones, que representan el 37 por ciento del total.
Los intervinientes han puesto también el foco en los efectos del Brexit en la "importante colonia" de españoles en Gran Bretaña que, según los últimos datos del Padrón de Españoles Residentes en el Extranjero superaba los 115.000 a fecha de 1 de enero, un 13 por ciento más que el año anterior, y en la situación de los 256.000 británicos que viven en España.
En el caso concreto de Castilla y León, los últimos datos cifran en 764 las personas británicas que residen en la Comunidad frente a 5.203 castellanoleoneses que lo hacen en Gran Bretaña, el 3 por ciento del total de la población de la Comunidad en el extranjero y el cuarto país del continente europeo donde residen más castellanoleoneses y el décimo a nivel mundial.
"Evidentemente, nuestra mayor preocupación son las personas y lo primero que hemos de procurar es que el Brexit sea lo menos problemático posible para nuestros ciudadanos", ha sentenciado el consejero de Empleo, quien ha situado en esas personas "la prioridad absoluta" de las negociaciones para salvaguardar los intereses de los británicos aquí y los derechos de los conciudadanos allá.
Prieto, Barrios y Fernández Carriedo han coincidido también al reclamar que el mercado de trabajo no sea uno de los mayores damnificados por el Brexit con restricciones a la libertad de permanencia y desplazamiento de los trabajadores y de los desempleados, deslocalizaciones empresariales, posibles caídas dramáticas de la contratación o impacto en las retribuciones.
El presidente del CES ha hecho especial hincapié en que con la salida de Reino Unido de la UE todos los países miembros, incluido España, tendrán que aportar más recursos ante el abandono del grupo de uno de los contribuyentes netos.
"Diálogo, diálogo y más diálogo", ha reivindicado el consejero a este respecto quien, al riesgo de la salida de Reino Unido de la UE, ha sumado otro de "peores efectos" en referencia a un "efecto contagio" de otros miembros comunitarios que, "por el peligroso auge de los populismos domésticos, pudieran decidir seguir los pasos del Reino Unido como fichas de dominó".