Agradecen la solidaridad de Las Navas del Marqués por acogerlos y reconocen el "miedo" vivido durante la evacuación
LAS NAVAS DEL MARQUÉS (ÁVILA), 19 (EUROPA PRESS)
Los habitantes de la localidad abulense de El Hoyo de Pinares realojados en el municipio vecino de Las Navas del Marqués debido al incendio de Cebreros afrontan este martes su segunda noche fuera de sus hogares con la esperanza de que los trabajos de extinción permitan su regreso a casa el miércoles.
Así lo han reconocido en declaraciones a Europa Press varios de los evacuados en las instalaciones del Colegio de Educación Infantil y Primaria (CEIP) Vicente Aleixandre de Las Navas, donde se encuentran acogidos desde que se ordenara su evacuación en la tarde-noche del lunes por la proximidad del incendio al casco urbano de El Hoyo de Pinares.
Todos ellos reconocen el "miedo" experimentado ante el cerco de fuego al que fue sometida su localidad, así como la necesidad de salir rápidamente y sin apenas poder recoger sus pertenencias, pero subrayan el buen trato brindado por el personal de Protección Civil y Cruz Roja, así como la "solidaridad" de sus vecinos de Las Navas.
Una situación que "no es agradable para nadie", como subraya un vecino al que el aviso de evacuación pilló cenando en esta localidad abulense que en verano incrementa notablemente su población gracias a personas que tienen su segunda residencia en El Hoyo de Pinares o cuentan con familiares allí, como es su propio caso, pues habitualmente recibe en el periodo estival a sus cuatro nietos.
También se ha referido este vecino al supuesto origen del incendio, que estaría en una colilla mal apagada, para advertir sobre estos comportamientos más allá de las responsabilidades que se atribuyen a los políticos. "Un cabeza rota es el que lo ha hecho, ese que pague, no sólo es culpa de los políticos", se ha quejado.
"TODO FUE MUY RÁPIDO"
"Todo fue muy rápido, nos imaginamos lo peor", añade otro vecino quien admite el "miedo" que le generó la escena. "Estás viendo lo que se te viene encima y dices, donde me lleven, me llevan, cuanto más lejos del fuego, mejor", ha recalcado.
Aunque reconoce la dificultad para conciliar el sueño durante su primera noche en Las Navas debido al calor y la preocupación, subraya que se encuentran "casi en familia" junto al resto de vecinos desalojados de El Hoyo de Pinares.
Una primera noche de angustia que vino a cerrar un día que, como subraya una vecina evacuada, transcurría con normalidad hasta que se desataron las llamas. "Pasamos la mañana en la piscina, era un día divino, la gente estaba contenta y todo bien, pero por la tarde empezó todo el follón, fue horrible", ha explicado.
Una experiencia que estos vecinos no habían vivido hasta ahora, a pesar de haber sido testigos de otros fuegos en zonas no muy lejanas. "Cuando lo vemos en televisión parece otra cosa, pero cuando nos toca es cuando se ve lo duro que es. Salir de casa con lo puesto es fastidiado", sentencia un último vecino cuya voz llega a estar al borde de la ruptura en algún momento.
Ante la incertidumbre sobre la evolución del fuego, estos vecinos deberán pasar la próxima noche en su improvisado alojamiento en Las Navas del Marqués, con la esperanza de poder regresar este miércoles si las condiciones lo permiten, pues aunque los técnicos no contemplaban en la mañana de este martes nuevas evacuaciones, no se planteaban el regreso de los habitantes de El Hoyo de Pinares hasta estar seguro de que el incendio no podrá reproducirse y obligar a desalojarlos de nuevo.