Una jornada del Colegio de Valladolid abordará este asunto y sus conclusiones se enviarán al Gobierno y los grupos del Congreso
VALLADOLID, 27 Ene. (EUROPA PRESS) -
Los veterinarios han reivindicado al Gobierno su derecho a acceder a formación sanitaria especializada, algo que ha reconocido el Tribunal Superior de Justicia, cuyo incumplimiento consideran que es una situación "anómala" que piden se solucione.
Precisamente este asunto será una de las cuestiones que se abordarán en una jornada que organiza en la capital vallisoletana este sábado en el Colegio de Veterinarios de Valladolid, en la que participarán diferentes expertos, representantes de este colectivo profesional, de la Salud Pública y sociedades científicas o sindicatos, entre otros.
En el encuentro se analizarán y elaborarán propuestas que permitan solucionar esta situación, ya que los veterinarios quedan como "los únicos profesionales sanitarios a los que la Administración no ha habilitado el acceso a la formación sanitaria especializada", han informado a Europa Press fuentes de la organización de la jornada.
Los veterinarios han apuntado que el modelo de formación sanitaria especializada, que progresivamente se ha consolidado en España permite contar con profesionales "mejor cualificados", con lo que ello representa de cara a los servicios que prestan y los resultados obtenidos.
Pero "sorprendentemente, a pesar de sus incuestionables y consolidadas funciones en el ámbito sanitario", los veterinarios son actualmente los únicos profesionales sanitarios a los que la Administración no ha habilitado el acceso a la formación sanitaria especializada, ello a pesar de que la normativa vigente así lo establece.
Por este motivo, el Consejo General de Colegios Veterinarios de España presentó ante la sala de lo Contencioso-Administrativo del Tribunal Supremo el correspondiente recurso, que se estimó y cuyo fallo reconoce el acceso de los veterinarios a diferentes especialidades de Ciencias de la Salud.
JORNADA DE TRABAJO
Antes de que se conociera la sentencia, ya se trabajaba en la organización de la jornada que reunirá en Valladolid a representantes de las sociedades científicas relacionadas con la Veterinaria de Salud Pública, entre ellas la Sociedad Científica de Veterinaria de Salud Pública y Comunitaria o la Asociación de Veterinarios Municipales, así como al presidente del Consejo General de Colegios Veterinarios de España, el doctor Juan José Badiola, y el presidente de la Federación Europea de Veterinarios, Rafael Laguens.
También participarán otros numerosos presidentes provinciales de diferentes colegios oficiales de veterinarios, de sindicatos como del Sindicato Independiente de Veterinarios de Extremadura o de la Unión Sindical de Castilla y León, y otros representantes de la Salud Pública, como la catedrática de la Facultad de Medicina de Valladolid, la doctora Ana Almaraz, o el director general de Salud Pública de la Junta de Castilla y León, Agustín Álvarez Nogal.
Las conclusiones de los trabajos realizados en esa jornada de trabajo, centradas en las especialidades veterinarias en Ciencias de la Salud, se elevarán a los Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad; al de Educación, Cultura y Deporte; y a los portavoces de los grupos políticos en el Congreso de los Diputados, "para urgir se regularice tan anómala situación, con el objetivo de que los profesionales veterinarios presten un mejor servicio a la sociedad a través de una mejor formación sanitaria especializada".
Las mismas fuentes han recordado que es frecuente que al pensar en la actividad profesional del veterinario venga a la mente su papel central en la salud y bienestar de los animales, función ampliamente conocida "frente a su contribución y ejercicio en la salud pública, a pesar del amplio conjunto de actividades desarrolladas y de su relevancia para la salud".
A este respecto, han recordado que la normativa vigente encomienda a los licenciados en veterinarios, entre otras funciones, el control de la higiene y de la tecnología en la producción y elaboración de alimentos de origen animal, así como la prevención y lucha contra las enfermedades animales, particularmente las zoonosis, y el desarrollo de las técnicas necesarias para evitar los riesgos que en el hombre pueden producir la vida animal y sus enfermedades.
Por ello, han añadido, la aptitud para el consumo de todos los productos de origen animal les corresponde, al igual que el control de las enfermedades que nos pueden transmitir (rabia, 'vacas locas', influenza aviar, tularemia, etcétera). Así, consideran que gracias a su callado trabajo en esas materias se previene que numerosas enfermedades afecten a las personas y se contribuye a contar con una sociedad "más sana, evitando el dolor, sufrimiento y las muertes que, de lo contrario, ocurrirían, ahorrando los costos que ello representaría".