Asegura que el aumento de precios "tiene algo de deformidad" porque 2020 fue un año anómalo
BARCELONA, 13 Dic. (EUROPA PRESS) -
Andbank prevé una moderación del crecimiento económico y de la inflación en Europa el año que viene, con un aumento interanual del PIB del 4,3% y un incremento generalizado de precios del 2,2% para el ejercicio fiscal 2022.
Lo han explicado este lunes en una rueda de prensa telemática el economista jefe del Grupo Andbank, Alex Fusté, y la responsable de macro de Andbank España, Marian Fernández, para exponer las perspectivas económicas para el próximo año y valorar la situación actual de los mercados.
Fernández ha sostenido que si los precios de la energía se mantienen estables o disminuyen, y en el caso de que la demanda disminuya y haya menos restricciones de oferta, las presiones inflacionarias cederán a medida que progrese 2022.
Sobre la inflación, Fusté ha explicado que no hacen mucho caso a los datos de inflación porque son lecturas interanuales que se construyen tomando como base situaciones de 12 meses anteriores, y ha dicho que 2020 es una anomalía en sí mismo y, por tanto, esta inflación "tiene algo de deformidad".
"A medida que comparemos años que se parezcan más, 2022 se parecerá más a 2021 de lo que 2021 se parecerá a 2020, la inflación irá moderándose de forma visible a lo largo de 2022", ha señalado, y ha abogado por no hacer mucho caso de inflaciones de enero, febrero y marzo, pero sí poner el foco en el segundo y tercer trimestre, ya que ahí es donde esperan ver una relajación.
EUROPA
Ha señalado que en Europa no se ha consumido como en Estados Unidos, por lo que el ahorro no se ha reducido tanto, lo que hace que el año que viene sea bueno en crecimiento, aunque prevé una mayor volatilidad ocasionada por los ajustes en política monetaria.
De hecho, se prevé que el Banco Central Europeo (BCE) anuncie el final del programa de emergencia pandémica (PEEP) para marzo de 2022, "esperándose que adopte medidas de transición para evitar efectos indeseados en el precio de los activos".
Creen que se podrían mantener unas condiciones de crédito favorables, sosteniendo el ciclo y los activos, gracias a una política acomodaticia por parte del BCE y el apoyo fiscal de los países europeos.
ESTADOS UNIDOS Y CHINA
En cuanto a Estados Unidos, Fusté ha sostenido que relativiza la retirada de estímulos porque ha dicho que es algo normal en una economía que se estabiliza: "Es muy buena señal".
"Sobre la subida de tipos de interés, tampoco estamos muy preocupados en el sentido de que dos o tres subidas este año nos seguirían dejando unas condiciones monetarias con un coste de capital que todavía estaría por debajo del retorno del capital. Es una condición necesaria y suficiente para que el mercado continúe", ha añadido.
Fusté también ha explicado que prevé un crecimiento de entre el 4,5% y el 5,5% de la economía americana con una tasa de empleo que se reducirá hasta el pleno empleo, así como un mayor consumo exterior, lo que aumentará las exportaciones del resto de países.
Sobre China, ha apuntado que el crecimiento caerá hasta niveles de 1990 pero ha sostenido que su expectativa con la renta variable es favorable, y ha previsto que el control del gobierno podría seguir siendo muy estricto.
Preguntado por las criptomonedas, Fusté ha señalado que desde la entidad las consideran un activo y no dinero, que no ofrece rentas, ni 'cashflows', ni dividendos: "Todavía estamos en el debate si será dinero, no tenemos muy claro si lo acabará siendo".