El retorno a las aulas se hará con un modelo de unidad de convivencia
ANDORRA LA VELLA (ANDORRA), 13 Ago. (EUROPA PRESS) -
Andorra realizará un cribado de los alumnos y el personal educativo --docentes, vigilantes de patio, colaboradores y todos los trabajadores que intervienen en la escuela-- para reducir el riesgo de contagio de la Covid-19, han explicado este jueves en rueda de prensa los ministros de Salud, Joan Martínez Benazet, y de Educación, Ester Vilarrubla.
Será un doble cribado: con prueba serológica y con TMA --como la PCR aunque más sensible, según han explicado en reiteradas ocasiones las autoridades andorranas--, que empezará la semana del 24 de agosto con los trabajadores y docentes y la semana siguiente con los alumnos de a partir de seis años.
El cribado se realizará en 'stoplabs', donde se podrán realizar las pruebas sin bajarse del vehículo, y servirá para facilitar un "retorno seguro" a las escuelas, minimizando el riesgo de transmisión del coronavirus SARS-CoV-2.
Asimismo, el cribado permitirá conocer la situación de la sociedad andorrana a nivel epidemiológico, ya que se calcula que se someterán a las pruebas cerca de 12.000 personas; las familias recibirán una carta en la que se les informará de la operativa del cribado, que será voluntario.
SIN MASCARILLA NI DISTANCIA EN EL AULA
El retorno a las aulas --que se hará de manera escalonada a partir del 9 de septiembre-- se realizará constituyendo unidades de convivencia por aula, así los alumnos no tendrán que llevar mascarilla ni guardar distancias entre compañeros.
Sí que tendrán que utilizar mascarilla y guardar distancias al salir del aula, y en el patio y el comedor se separarán por grupo de convivencia.
Quien no quiera someterse a las pruebas del cribado no podrá integrarse al grupo de convivencia y tendrá que llevar mascarilla y guardar las distancias durante 14 días a modo de cuarentena.
Con la situación epidemiológica actual, no se plantea reducir la ratio de alumnos por grupo y aula, pero, si la evolución de la pandemia lo requiriera, ya se han buscado alternativas: "Tendríamos soluciones para todos los casos", ha afirmado Vilarrubla.
En este sentido, Martínez Benazet ha afirmado que ahora se tienen "más planes de contingencia diseñados" que cuando se reabrieron los centros en junio, y también ha explicado que no se excluye la posibilidad de tener que cerrar aulas.
"No vemos que lleguemos a la situación de tener que cerrar un centro", ha manifestado el ministro de Salud, de manera que la voluntad es aplicar el protocolo por el cual sólo se confinan los casos positivos y sus contactos directos.
REFUERZO DEL ACOMPAÑAMIENTO EMOCIONAL
Vilarrubla ha explicado que en el inicio del curso escolar se reforzarán las áreas de acompañamiento emocional y de repaso de conocimientos previos, a partir del que se van añadiendo los nuevos conocimientos, con el objetivo de asegurar que aquellos alumnos que han tenido más dificultades para seguir el curso a distancia puedan recuperar.
La ministra de Educación ha manifestado que la escuela es un "elemento igualador", en el sentido de que se eliminan las diferencias de recursos que puedan tener las familias.