BARCELONA, 26 Jun. (EUROPA PRESS) -
El Ayuntamiento de Barcelona ha impulsado la renovación del Mercat de Sant Andreu, para la que trasladará a sus comerciantes a un mercado provisional que empezará a construir en mayo, con el objetivo de que el nuevo mercado pueda abrir de nuevo en el primer semestre de 2019.
La concejal de Comercio y Mercados, Montserrat Ballarín, ha destacado este lunes en un comunicado que el mercado estará muy integrado en su entorno y, cuando esté terminado, será un motor para el comercio de proximidad y para revitalizar la zona comercial.
El mercado, cuyo edificio actual se derribará manteniendo parte de la estructura original, estará formado por dos módulos encajados: uno de diez metros de ancho y 17 de largo que albergará siete establecimientos no alimentarios, y otro de 15 de ancho y 63 de largo que acogerá los 18 alimentarios y diversos servicios.
El equipo técnico y de arquitectura del Área Metropolitana de Barcelona (AMB) está redactando el proyecto del mercado, cuya remodelación supondrá una inversión de 9,5 millones de euros, incluyendo el mercado provisional.
El volumen del edificio se rebajará para reducir su impacto vecinal tanto a nivel de calle como de los edificios del entorno, y gran parte de su perímetro será de cristal, con una planta baja y un sótano, donde su ubicarán los espacios de logística, almacén y cámaras frigoríficas, entre otros elementos.
El proyecto prevé que los servicios y suministros soterrados que se vean afectados por la reforma deberán ser desviados, mientras que el mobiliario urbano y los árboles se trasladarán y replantarán, ha detallado el Ayuntamiento.
El contenido de esta noticia está elaborado en colaboración con el Ayuntamiento de Barcelona