BARCELONA, 18 May. (EUROPA PRESS) -
La directora general de la Unesco, Audrey Azoulay, ha defendido este miércoles que la educación superior "no debe convertirse en un privilegio" sino que es parte del derecho fundamental a la educación.
Para que siga siéndolo, ha opinado, la educación debe adaptarse "constantemente" a los cambios que ocurren en el mundo, ha dicho en la apertura de la Conferencia Mundial de Educación Superior de la Unesco que se celebra en el Palau de Congressos de Barcelona, en el recinto Montjuc de Fira de Barcelona, hasta el viernes.
En este sentido, ha mencionado que, mientras el número de estudiantes universitarios se ha doblado en 20 años, el 90% de los jóvenes de África subsahariana no tiene acceso a la educación superior.
Azoulay, además, ha pedido estar "más vigilantes en la defensa de la libertad académica" siguiendo los principios del derecho internacional y seguir impulsando la movilidad internacional.
Ha pedido a todos los estados miembros de Naciones Unidas que ratifiquen sus convenciones regionales de educación superior, la última de las cuales se aprobó en 2019 para América Latina y el Caribe.
Por último, ha elogiado la calidad de Barcelona como "ciudad de la cultura, el conocimiento y la juventud" --es la primera vez que la Conferencia se realiza fuera de París (Francia), sede de la Unesco--, y ha ensalzado la cooperación que comparte la organización con España.