Comuns pide que se haga un museo, un centro de documentación de la tortura y un espacio de reparación
BARCELONA, 5 Dic. (EUROPA PRESS) -
Una treintena de personas se ha concentrado este jueves por la mañana en la plaza Sant Jaume de Barcelona, coincidiendo con la visita del ministro Fernando Grande-Marlaska, para pedir que la Jefatura de la Policía Nacional de la Via Laietana se convierta en un espacio de memoria para las víctimas de la dictadura franquista.
Entre los manifestantes estaba el activista Carlos Vallejo, nacido en 1950, que sufrió torturas durante 20 días en Via Laietana 43, cuando era la sede de la Brigada Político-Social en Catalunya, tras ser acusado de haber organizado un sindicato en la Seat: "Que se convierta en un espacio de memoria para explicar lo que allí pasó y que no vuelva a pasar".
"Nos torturaban y nos encarcelaban por ejercer derechos que ahora son constitucionales, como el derecho de asociación, reunión, sindicación o huelga, pero que antes eran delitos por los que pagabas con la prisión y la tortura", ha expresado Vallejo a Europa Press.
Su caso, dice, no es excepcional, sino el de miles de personas --en sus palabras textuales-- que sufrieron violencia física y psicológica que todavía les provoca "trauma y dolor".
Aunque reconoce que la creación del Memorial Democràtic de la Generalitat fue un hecho simbólico, pide que este espacio, en el que ahora se encuentra la Jefatura de la Policía Nacional, se destine a explicar lo que sucedió para que los jóvenes conozcan la historia y la dictadura franquista, mientras que el Gobierno defiende que la policía siga en este edificio barcelonés.
"No busco resarcir mi situación personal, porque hay cosas que son imperdonables: la tortura es imperdonable, los asesinatos son imperdonables. Lo que yo busco es que eso no se repita", sostiene Vallejo.
ESPACIO DE MEMORIA
A la concentración también han asistido el concejal de BComú en el Ayuntamiento de Barcelona Jordi Rabassa, y el diputado de los Comuns en el Parlament, Andrés García Berrio, que ha recordado que desde su grupo parlamentario impulsaron una propuesta de resolución para la reconversión de la Via Laietana en un espacio de memoria.
"Estamos trabajando, creo que principalmente desde la sociedad civil y diferentes espacios políticos, entre ellos Comuns, para intentar que, cuanto antes, la Via Laietana sea un espacio de memoria, como lo es el ESMA en Buenos Aires, por ejemplo", sostiene Berrio, que pide que el espacio se dedique íntegramente a hacer un museo, un centro de documentación de la tortura y un espacio para la memoria y reparación de las víctimas.
"El año que viene hará 50 años de la muerte de Franco, no podemos llegar a esa fecha sin que esto sea un espacio de memoria", ha interpelado al Govern de la Generalitat.