Reta a los 'comuns' a decidir "si se mueven en un contexto democrático o sometidos al Estado".
BARCELONA, 4 Feb. (EUROPA PRESS) -
El presidente de la Associació Catalana de Municipis (ACM), Miquel Buch, ha avisado de que, si el Estado lleve a cabo medidas coercitivas para evitar el referéndum como precintar escuelas, irán "a teatros, a pabellones, a centros cívicos y, si no a las calles y plazas, porque se trata de democracia".
"Pueden amenazar todo lo que quieran", ha subrayado en una entrevista de Europa Press, tras recordar que más de 700 ayuntamientos catalanes cedieron espacios para que los ciudadanos pudieran votar el 9N, como fue el caso de algunos municipios que no tienen institutos.
Según Buch, que también es alcalde de Premià de Mar (Barcelona), los ayuntamientos serán igual de estratégicos y volverán a tener un "papel activo" en esta ocasión, y se ha mostrado convencido de que los que defiendan la democracia, al margen de su color político, estarán dispuestos a ceder espacios para que se pueda votar.
Sobre cómo debe reaccionar el Govern, ha asegurado que estarán a la altura de las circunstancias y que, ante cualquier impedimento, tienen la obligación de tirar adelante para cumplir con el compromiso adquirido con la ciudadanía, y porque "no están solos".
Al preguntársele si cree que el Gobierno puede suspender la autonomía catalana, Buch lo desconoce pero admite que se espera cualquier cosa: "El Gobierno ha demostrado que es tramposo. Puede hacer lo que quiera porque está acostumbrado a actuar así".
"Es un Estado que cuando le interesa al ministro del Interior afina a la Fiscalía, mueve la policía con intereses políticos, persigue a políticos con intereses partidistas, y no pasa nada", ha lamentado el presidente de la ACM.
GOBIERNO CON "ACTITUD DEL PAVO REAL"
A su juicio, el Gobierno adopta "la actitud del pavo real al abrir todas las plumas para asustar al adversario", lo que considera que se evidencia ahora a falta de pocos días para el juicio del expresidente de la Generalitat Artur Mas y las exconselleras Irene Rigau y Joana Ortega por el 9N.
"Ellos juegan al todo vale, y nosotros a todo vale por la democracia", ha sentenciado Buch, que ha negado cualquier credibilidad a la 'operación diálogo' del Ejecutivo central con la Generalitat.
En este contexto, según Buch, los 'comuns' empiezan a notar "la incomodidad de tener que salir de un discurso ambiguo y posicionarse" sobre si están por el referéndum, también en el caso de que no esté acordado con el Gobierno.
"Deben decidir si se mueven en un contexto democrático o si prefieren vivir sometidos a un Estado que decide sobre qué se habla y qué se pregunta", ha resaltado, implicando en ello a la alcaldesa Barcelona, Ada Colau.