"Hay un gobierno que no se puede con C's-Podemos y otro que no se debe con independentistas"
MATARÓ (BARCELONA), 30 (EUROPA PRESS)
El exlíder del PSOE Alfredo Pérez Rubalcaba ha defendido este viernes priorizar la investidura de un presidente del Ejecutivo central y posponer el congreso del partido: "Primero hay que darle un gobierno a España y después ya hablaremos del PSOE".
Lo ha declarado antes de asistir a un acto de homenaje en Mataró al exdiputado, exdelegado del Gobierno en Catalunya y exalcalde de Caldes d'Estrac Joan Rangel, en un acto donde también se prevé la asistencia del primer secretario del PSC, Miquel Iceta, y la vicesecretaria Núria Parlon --ambos, candidatos a liderar el partido--.
"Lo primero es darle un gobierno estable a España y luego ya tendremos tiempo de ocuparnos del partido", ha dicho, en contra de lo que defiende Sánchez, que rechaza investir a Mariano Rajoy (PP) y defiende celebrar primarias y un congreso cuanto antes para que decida la militancia.
PODEMOS "LO TUVO A HUEVO"
Ha destacado que Sánchez defendió dar a España un gobierno estable tras las elecciones del 20 de diciembre, y por eso se sometió a una investidura, convencido de que era posible una mayoría progresista: "Hubiera bastado con la abstención de Podemos y no fue posible. Ahora Pablo (Iglesias) dice que quiere un gobierno progresista y lo tuvo a huevo".
El antecesor de Sánchez cree que ahora debe aplicarse la misma lógica de priorizar la gobernabilidad del país, aunque no ha querido dar detalles de cómo: "Eso no quiere decir que tenga que abstenerse; digo que lo peleemos, que lo trabajemos, pero hay que darle ya un gobierno a España".
Preguntado por si eso significa que intentar liderar una alternativa, ha respondido que lo ve muy difícil porque "hay un gobierno que no se puede hacer, con C's y Podemos, que se autodeclaran incompatibles, y otro gobierno que no se debe hacer, con los independentistas".
LAMENTA LA APUESTA DE ICETA
Rubalcaba ha destacado su buena relación con Miquel Iceta pero le ha afeado que se abriera a negociar un gobierno alternativo con los independentistas "al día siguiente de oírle al señor Puigdemont 'Vamos a ir a un referéndum sí o sí".
"Se trata del Gobierno de España y es muy difícil hacerlo con los que quieren romper España", y ha añadido que se podría llegar a hacer una 'investidura contra Rajoy', pero que defender un 'gobierno contra Rajoy' sería insostenible cuatro años.
Admite que el Comité Federal del PSOE nunca ha votado a favor de la abstención para facilitar un gobierno de Rajoy --estrategia que defienden los críticos--, pero ha matizado que el órgano rector del partido "sí votó priorizar la gobernabilidad, anteponer los intereses de España a las necesidades del PSOE".
"Debemos dedicarnos en cuerpo y alma para conseguir que España tenga un gobierno", ha insistido, y ha lamentado ver roto el diálogo entre los afines a Sánchez y sus detractores.
"HABLAR" CON LOS DIMITIDOS
Precisamente sobre la crisis del partido, ha dicho que, si él fuera el actual primer secretario, reflexionaría sobre los apoyos en el Comité Federal y llamaría a los 17 que han dimitido para intentar acercar posiciones.
"Si bajo a la sala de la Ejecutiva y me encuentro que, de 38, sólo tengo 15 al lado, primero pregunto al secretario de organización si tenemos quórum, y luego me pondría a hablar" con los ausentes, ha añadido.
Cree que un congreso no es el espacio más adecuado para desencallar la investidura porque para lo que sirve principalmente es para marcar la estrategia del partido para los próximos cuatro años: "Ese no es el ámbito para discutir la gobernabilidad. Ahora hay que tomar una decisión una vez y en un mes".
TERCERAS ELECCIONES
"Los que defienden el 'no' a Rajoy deben prepararse para unas terceras elecciones, y lo mejor para eso no es un congreso con problemas, sino prepararse para esas elecciones", ha considerado.
Rubalcaba no imagina como acabará el Comité Federal que ha convocado el partido para este sábado, pero sí ha avanzado que no asistirá "aunque podría hacerlo", si bien no lo ha justificado.
Ha calificado de difícil la situación actual del partido y que no le "extraña" que el expresidente del Parlamento Patxi López diga que le duele lo que está pasando.