La prohibición empezará a aplicarse en la semana de las municipales
BARCELONA, 29 Abr. (EUROPA PRESS) -
El Ayuntamiento de Barcelona ha aprobado este viernes la prohibición del nudismo y seminudismo en la calle, que supondrá sanciones más elevadas que saltarse un semáforo en rojo, ha advertido el segundo teniente de alcalde y líder de ICV-EUiA, Ricard Gomà.
Ecosocialistas y ERC se han opuesto y el PP se ha abstenido a la prohibición, votada en forma de modificación de la ordenanza del civismo después de que no hubiese acuerdo para incluirla cuando se aprobó esta norma en 2006, y que ha prosperado con una alianza PSC-CiU.
Entrará en vigor en la semana de las elecciones municipales del 22 de mayo, y cometerán infracciones leves y serán sancionados quienes sean cazados y se nieguen a vestirse tras un aviso de la Guardia Urbana: de 300 a 500 euros para los desnudos o "casi desnudos", y de 120 a 300 para los semidesnudos: sólo en bañador o "con otra pieza de ropa similar".
La votación se ha producido en un pleno 'escoba' de final de mandato con 17 puntos que ha durado poco más de media hora estando desnudo de público, y donde los grupos han recurrido a su ideología para posicionarse sobre una nueva regulación de la calle, que tiene sus excepciones, como que sólo podrá irse en bañador por el Passeig Marítim.
La tercera teniente de alcalde y responsable de Seguridad, Assumpta Escarp, ha declarado a los medios que el PSC debe "normativizarse" cuando hay un problema en el espacio público, y ha resaltado el carácter preventivo de la nueva norma y que no regula cómo vestir.
Xavier Trias (CiU) ha afirmado que ya era hora de que se prohibiera, destacando que exige voluntad de aplicarla y un gobierno que vaya a una --porque el bipartito (PSC e ICV-EUiA) han votado diferente--, y cree que es un buen mecanismo de prevención: "No soy hiperregulador".
Alberto Fernández (PP) se ha abstenido porque no se ha eliminado el aviso previo, y ha criticado que el alcalde, Jordi Hereu (PSC), y Trias han pactado "una tarjeta amarilla al nudismo cuando lo que se necesita es una tarjeta roja y al vestuario".
Gomà ve falta de proporcionalidad, y ha avisado de que "se puede sancionar con más ir en bañador por la calle que saltarse un semáforo en rojo, o igual que ir a 80 km/h por la calle de Sants", y ante los periodistas ha criticado a su socio del PSC por acabar el mandato pactando con CiU cuando empezó con un acuerdo de gobierno de izquierdas.
LA MINIFALDA, EN EL PASADO
"La letra la pone CiU, la música el PP y el PSC va a remolque de letra y música", ha remachado, mientras que Jordi Portabella (ERC) ha avisado de que "20 años atrás hubiesen prohibido la minifalda o la camiseta imperio, y ahora van contra el top, transgrediendo la filosofía de la ordenanza del civismo de regular lo que privatiza el espacio público.
Portabella ha revelado que en un reciente encuentro preelectoral de los cinco candidatos a las municipales encontraron a dos obreros que trajinaban maderas con el torso desnudo, a lo que Escarp ha apelado ante los medios al "sentido común" y ha dicho que no sancionarán estos casos, pero sí a quien que vaya con pantalón largo y sin camiseta alrededor de la Sagrada Familia.
El alcalde ha podido aprobar definitivamente en el pleno con los votos del bipartito (PSC e ICV-EUiA) y ERC la otra ordenanza que cierra el mandato: modificar la de Establecimientos y Centros de Comercio Alimentario para adaptarse a las directivas europeas, y que en el último momento ha pendido de un hilo por un escrito contra los 13 gremios afectados.
Para Fernández, Hereu protagoniza su "última alcaldada" del mandato, al no aceptar que los grupos presentaran proposiciones en este pleno extraordinario, donde el popular quería colar iniciativas en relación a los recortes del Govern y la publicidad municipal.
Hereu sólo ha hablado para organizar la sesión y cerrarla recordando que este mandato han alcanzado 906 acuerdos, 683 aprobados por unanimidad, y ha recordado que habrá otro pleno para aprobar las actas y despedir a los concejales que no salgan elegidos en las municipales antes de la constitución del nuevo Ayuntamiento, prevista para el 11 de junio.