Andreu niega haber dimitido por el caso de su hijo sino por "falta de confianza" de la Mesa
BARCELONA, 10 (EUROPA PRESS)
La presidenta del Parlament, Laura Borràs, ha aceptado este viernes la dimisión de la secretaria general de la Cámara catalana, Esther Andreu, tras haber recibido el informe de la Oficina Antifrau de Catalunya (OAC) en relación al proceso selectivo del hijo de Andreu como ujier.
Según un comunicado de la Cámara, Borràs ha decidido aceptar la dimisión una vez valorado el contenido del informe, por lo que Andreu será cesada de sus funciones este mismo viernes.
La hasta ahora secretaria general de la Cámara anunció su voluntad de dimitir en la reunión de la Mesa de la semana pasada, y la decisión estaba sujeta a que la aceptara Borràs, que estaba a la espera de recibir este informe de la OAC.
Andreu, que fue nombrada secretaria general por Borràs hace un año en sustitución de Xavier Muro, aseguró que no había participado "ni directa ni indirectamente en el proceso de selección" de ujieres a través del cual su hijo fue seleccionado.
En un comunicado, la secretaria general aseguró que "por este motivo, consideró que no era pertinente informar a la Mesa sobre ninguno de los aspirantes", y el órgano nombró como personal interino a las cuatro personas que obtuvieron más puntuación a través del proceso selectivo, entre ellas el hijo de Andreu.
Además, fuentes de Presidencia del Parlament aseguraron que Borràs desconocía su relación de parentesco, y que pidió explicaciones a Andreu para que detallase el proceso de selección "desde el principio hasta el final".
"FALTA DE CONFIANZA"
Andreu registró el martes una carta para los miembros de la Mesa en la que argumentó que existe una "falta de confianza de la mayoría" del órgano rector hacia ella, y defendió no haber informado de que su hijo participaba en un proceso de selección de la Cámara.
Destaca que haber presentado su dimisión antes de que la OAC emitiera su informe puede dar a entender que ella asume "alguna responsabilidad en relación a este extremo, y no es así", porque considera que no haber informado del parentesco era la opción más respetuosa hacia los aspirantes y a su derecho a la intimidad e imagen.
"Era más respetuoso hacia la mesa, que adopta acuerdos que se integran en este proceso, no dar información en relación a ninguno de los aspirantes, porque permite asegurar la ausencia de discriminación positiva o negativa entre los candidatos", añade en la carta, en la que asegura que el informe de servicios jurídicos no apreció irregularidades por este parentesco.
Ha advertido de que no puede avalar la "externalización" de la revisión del procedimiento --llevándolo a la OAC-- porque considera que supone una muestra de desconfianza en la Administración parlamentaria y un menosprecio a las funciones que corresponden a sus servicios jurídicos, según Andreu, que ha dicho que es un hecho sin precedentes.
"INSTRUMENTO PARA ATACAR"
Asegura que desde septiembre ha sido objeto de acusaciones que ponen en entredicho su imparcialidad, objetividad, independencia y profesionalidad: "Esta situación y el hecho de saber que soy el instrumento para atacar a más altas instancias no hacen menos doloroso, injusto e insoportable, y hacen patente, la falta de confianza de la mayoría de la Mesa".
Ha sostenido que existe una falta de entendimiento y comunicación con el actual letrado mayor que dificulta el desarrollo de sus funciones, y que se da una situación insostenible por "afirmaciones que desacreditan la profesionalidad de la secretaria general acusándola de vulnerar el propio estatuto jurídico de los letrados".