CC.OO. y UGT reclaman mejoras laborales de la patronal y la Generalitat

Ros incide en que el Govern ya no tiene la excusa de no tener Presupuestos

BARCELONA, 23 Mar. (EUROPA PRESS) -

Unos 700 trabajadores de múltiples sectores --según Guardia Urbana-- se han concentrado este jueves ante la patronal Fomento del Trabajo en Barcelona para reclamar empleo, salarios dignos y recuperación de derechos sociales convocados por sindicatos CC.OO. y UGT de Catalunya, cuyos secretarios generales han augurado que las movilizaciones continuarán hasta que haya mejoras por parte de los empresarios y de la Generalitat.

En declaraciones a la prensa, el secretario general de CC.OO. de Catalunya, Joan Carles Gallego, ha defendido que se movilizarán "tantas veces como haga falta" porque la riqueza de la recuperación económica no llega a las condiciones de trabajo ni a los salarios, ni en el sector privado ni en el público --con la Generalitat más rezagada que otras administraciones de España--.

El secretario general de UGT de Catalunya, Camil Ros, ha incidido en que la Generalitat ya no tiene "la excusa" de que no hay Presupuestos --ya que fueron aprobados este miércoles en el Parlament--, por lo que debe poner manos a la obra para recuperar derechos de los trabajadores y salarios y convocar plazas, mientras que en el sector privado ha indicado que hay problemas laborales en casi todos los sectores.

Entre los asistentes a la movilización de este jueves había representantes sindicales de la industria, el transporte, la educación, la atención a la dependencia, el sector cárnico, el ámbito editorial, la hostelería y la seguridad, entre otros, que han cortado Via Laietana.

Preguntados por la última encuesta del Colegio de Economistas de Catalunya, que recoge que el 70% de los socios consultados cree que la precariedad laboral influye negativamente en el crecimiento económico, Ros ha opinado que estos resultados muestran que se ha llegado a "condiciones insostenibles" y que perjudican al país.

Gallego ha afirmado que la precariedad es antieconómica porque hace ganar dinero a corto plazo pero resta capacidades de futuro, y si persisten los bajos salarios el personal mejor preparado emigrará; los sindicatos exigen a la patronal un aumento salarial del 1,8% para evitar que los trabajadores pierdan poder adquisitivo con la subida de la inflación.