BARCELONA, 3 Oct. (EUROPA PRESS) -
Centenares de Bomberos de la Generalitat y Bomberos de Barcelona han protestado este martes en la Delegación del Gobierno en Catalunya, ante la que se han girado, dándole la espalda, y han levantado las manos en silencio durante unos diez minutos, acción a la que se han sumado también centenares de ciudadanos.
Unos 400 bomberos han salido a las 11.00 horas del paseo Sant Joan y se han dirigido hacia la Delegación, en la calle Mallorca, prácticamente en silencio y sólo con la música de una gaita; a ellos se han sumado ciudadanos, que se han juntado con otros que ya estaban ante la Delegación, que los han recibido con vítores y gritando 'Els bombers seran sempre nostres'.
El edificio de la Delegación, protegido por una decena de furgonetas tanto de Mossos d'Esquadra como de Policía Nacional, se ha rodeado con una 'senyera' sobre la que se han colocado carteles con mensajes como 'Embajada española, a diez metros', 'El papel siempre gana a la piedra' y 'Todo por la napia'.
Tras unos diez minutos en silencio y con la calle cortada al tráfico, los bomberos, sin girarse hacia la Delegación --que han tachado de indigna--, han vuelto hacia el paseo Sant Joan, con la cabeza de la protesta indicando: "Mirad hacia adelante, nunca hacia atrás".
Les han seguido más de 600 ciudadanos, y decenas de ellos les han hecho un pasillo mientras les aplaudían y gritaban: 'Menys policies i més bombers', algo que también han coreado desde vehículos que pasaban por la zona y que han tenido que esperar a que pasara la manifestación, que después se ha dirigido hacia la plaza Universitat.
Han vuelto hacia la avenida Diagonal para ir por paseo Sant Joan, donde se han juntado con otros grupo de otros 200 bomberos y 300 ciudadanos, que venían de protestar ante la sede del PP, en la calle Comte d'Urgell, e iban también hacia Universitat.
Ante la Delegación han permanecido decenas de ciudadanos, y algunos de ellos han desplegado una 'senyera' de 80 metros de largo, que han llevado después a la plaza Universitat, pasando por la escuela Jaume Balmes, situada a pocas calles y en la que la policía cargó el domingo para impedir el referéndum.
Los ciudadanos concentrados ante la Delegación del Gobierno gritan consignas como 'Millo dimisión', en referencia al delegado del Gobierno en Catalunya, Enric Millo; 'Els mossos són la nostra policia'; 'Els carrers sempre seran nostres', y 'Hem votat', y vehículos que pasan pitan constantemente, alguno al ritmo de diversas de estas consignas.