Concluye que la "escasez de recursos" es uno de los principales problemas del sistema de asilo español
BARCELONA, 28 Jun. (EUROPA PRESS) -
El Barcelona Centre for International Affairs (Cidob) ha alertado de que en la Unión Europea (UE) el destino de las personas refugiadas "sigue dependiendo del Estado miembro" en el que reciben la protección internacional, pese a los esfuerzos por garantizar estándares mínimos de acogida armonizados.
Es una de las conclusiones del Informe Nacional para España NIEM 2022 que ha elaborado el Cidob con financiación de la Comisión Europea, que analiza desde 2017 los sistemas nacionales de acogida de 14 países de la UE, ha informado el centro en un comunicado este martes.
El marco jurídico sobre asilo en esos 14 países es el aspecto que mejor puntuación recibe en el análisis, con un 71,5 sobre 100, mientras que "los problemas más graves" se dan en la fase de implementación, que recibe un 32,2 sobre 100.
Los investigadores han concluido que España --el cuarto país de la UE que más solicitudes de asilo recibe-- tiene uno de los marcos jurídicos más abiertos y favorables de Europa, "pero sufre de límites estructurales que perjudican su implementación".
Así, la falta de un modelo de gobernanza multinivel, "la escasez de recursos" y la ausencia de un seguimiento sistemático basado en la evidencia empírica son los tres principales problemas del sistema de protección internacional español.
Según el Cidob, estas carencias afloran "a la hora de tratar con los perfiles especialmente vulnerables, como los refugiados LGTBI o los solicitantes que tienen que salir del sistema" tras denegárseles el asilo, lo que les lleva a la exclusión social.
PROBLEMAS EN LA PRÁCTICA
Para el investigador del Cidob y coordinador del informe, Francesco Pasetti, "en la práctica el sistema español es incapaz de garantizar estándares de acogida e integración" a todos los refugiados, a pesar de tener un marco jurídico abierto y favorable.
"Un modelo de gobernanza de la acogida eficaz pasa inevitablemente por la inclusión de actores regionales y municipales, por un sistema de financiación concertado y a largo plazo, por un marco de cooperación y planificación más extenso, y por mecanismos de control y seguimiento basados en la evidencia empírica", ha advertido.
Entre los países analizados, Suecia es el que garantiza mejores condiciones de acogida a los refugiados, mientras que Hungría, Polonia y Bulgaria presentan "graves carencias y problemas estructurales" y se sitúan en las últimas posiciones del índice.
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