Reacciona ante el "riesgo" de un gobierno de PSC y Junts
BARCELONA, 29 May. (EUROPA PRESS) -
BComú, formación liderada por la actual alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, ha bajado hasta convertirse en la tercera fuerza en el Ayuntamiento de la capital catalana y ha abierto la puerta a un Gobierno municipal junto al PSC --que ha quedado en segunda posición-- y ERC --cuartos--.
Los comuns han recabado el 19,71% de los apoyos --131.594 votos, 142 menos que los socialistas-- y han conseguido nueve escaños, uno menos que en 2019, tras un recuento reñido en el que, con más del 99,6% del voto escrutado, aún quedaba por asignar un último concejal, que finalmente se han atribuido los socialistas.
Colau ha hecho una campaña con las encuestas situándola como una de las candidatas a la victoria, lo que ha provocado que buscara la movilización del voto progresista y conseguir liderar un gobierno formado por BComú, PSC y ERC, ante la posibilidad de un pacto entre el PSC y Junts.
Su discurso ha estado marcado por constantes referencias al "riesgo" de un gobierno formado por los socialistas y Junts, y en contraponer su modelo frente al del exalcalde y candidato de Junts, Xavier Trias, con quien no ha terminado de polarizar la campaña --como parecía apuntar cuando él se presentó-- poniéndoles de nuevo en duelo tras 2015, cuando Colau consiguió la alcaldía.
A lo largo de la campaña, la candidata de Comú ha criticado que Trias no presentaba un modelo alternativo al suyo y que solo se basaba en querer "destrozar" lo que ella ha impulsado en los últimos ocho años, y también ha reprochado a Collboni haber abandonado el gobierno municipal a dos meses de campaña.
Ante esta situación, en su valoración de los resultados ha recordado que Trias ha ganado los comicios "con solo 11 concejales" mientras que los comuns, junto a los socialistas y ERC, suman 24.
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La candidatura de Colau sigue perdiendo votantes después de los resultados de En Comú Podem en las últimas elecciones autonómicas, en las que no mejoró los resultados que obtuvo en 2018 y mantuvo ocho escaños, y la bajada de 71 a 35 escaños en las generales de 2019 (aunque consiguieron entrar en el Ejecutivo central en una coalición de Gobierno de la mano del PSOE).
Estas cifras también agravan la situación de Podemos en el conjunto del Estado, ante su crisis con la plataforma Sumar de la vicepresidenta Yolanda Díaz, con las que concurrirá a las generales de este año para intentar recoser el espacio a la izquierda del PSOE.