BARCELONA 8 Feb. (EUROPA PRESS) -
El conflicto entre los estibadores y el Ministerio de Fomento ha empezado a afectar al Puerto de Barcelona y a la actividad de sus terminales de mercancías debido a que se están registrando rendimientos "por debajo de lo habitual".
Según han explicado a Europa Press fuentes del Puerto de Barcelona, la afectación se está produciendo, sobre todo, en la operativa terrestre, ya que los camiones no pueden acceder a las terminales de mercancías, lo que está ocasionando colas kilométricas.
Para minimizar el impacto de esta situación, la Policía Portuaria está gestionando el flujo de camiones para garantizar la normalidad en la circulación y el tráfico.
También se han habilitado espacios de estacionamiento donde los camiones pueden esperar hasta su turno de acceso a las terminales --los accesos al Puerto de Barcelona no están afectados--.
HUELGA
Todo esto se suma a que los estibadores de los puertos barajan convocar huelga para los próximos días 20, 22 y 24 de febrero, en protesta por la reforma que ultima el Ministerio de Fomento para romper el monopolio que este colectivo tiene del sector encargado de cargar y descargar los barcos, es decir, de gestionar las mercancías que entran y salen de España por mar.
El calendario definitivo de paros está aún en negociación, y por tanto pendiente de concreción y de convocatoria formal, entre el principal sindicato del sector, la Coordinadora Estatal de Trabajadores del Mar, y el resto de formaciones con representación entre este colectivo (CC.OO., CIG y CGT).
En principio, los sindicatos prevén llamar a los estibadores a parar todas las horas impares del periodo comprendido entre las 8.00 horas del 20 de febrero y la misma hora del día 21, y de las mismas franjas horarias de los días 22 y 23 de febrero y 24 y 25 de este mes.
Con la convocatoria, este colectivo de trabajadores de la red de 46 puertos españoles pretende manifestar su rechazo a la reforma del sector planteada por Fomento, dado que, en su opinión, constituye un "despido generalizado" y una vía de precariedad y desregulación laboral.
REFORMA
La reforma del sector que el Ministerio de Fomento ultima con el fin de cumplir con la normativa comunitaria y evitar una eventual sanción de la UE supone la liberalización de la contratación de estibadores, un colectivo formado por unos 6.150 trabajadores, actualmente concentrado en las denominadas sociedades de gestión de trabajadores portuarios (Sagep).
El Ministerio prevé articular un plazo de tres años para que paulatinamente desaparezcan estas sociedades y las empresas estibadoras puedan contratar libremente a sus trabajadores.