Convivencia Cívica considera una "victoria" el auto del TSJC sobre inmersión

BARCELONA 10 Abr. (EUROPA PRESS) -

Convivencia Cívica Catalana (CCC) ha considerado una "victoria" el auto del Tribunal Superior de Justicia de Catalunya (TJSC) que obliga a la Generalitat a introducir también el castellano en la clase del alumno cuyos padres hayan pedido por la vía judicial la escolarización en esta lengua.

Según ha informado la asociación ciudadana en un comunicado, la resolución supone una "victoria del bilingüismo y del sentido común", ya que a una sociedad bilingüe le debe corresponder por lógica y respeto a todos una escuela también bilingüe.

La entidad ha reclamado a la Conselleria de Enseñanza una "política de equidad lingüística" en las escuelas que promueva un uso equilibrado y respetuoso de ambas lenguas oficiales en la enseñanza, en lugar del modelo de inmersión actual que es únicamente en catalán, a excepción de la materia de lengua y literatura castellana.

Convivencia Cívica ha agregado que en ningún otro territorio bilingüe de Europa se aplica ningún modelo parecido al sistema de inmersión catalán porque "en todos integran sus dos lenguas oficiales como lenguas vehiculares".

También ha cargado contra el argumentario de Enseñanza sobre que el modelo de inmersión es un sistema de éxito y de cohesión social: "No puede calificarse de exitoso un modelo con unos pésimos indicadores y resultados educativos".

En el auto sobre medidas cautelares, que responde dos recursos de reposición de la Generalitat y de esta entidad, Convivencia Cívica solicitaba al TSJC que explicitara "con mayor detalle" la forma de aplicación del bilingüismo, al afirmar que no estaba suficientemente aclarada.

Ante ello, el tribunal catalán ha dictado que el sistema "ha de adaptarse a toda la clase --o unidad escolar-- de la que forma parte ese alumno", lo que afecta al estudiantes juntamente con sus compañeros, y no sólo al estudiante.

Argumenta que, de otro modo, "tendría que ser separado el hijo de la parte actora en una clase aparte, o permenecería en la misma con atención individualizada", si bien explicita que este extremo ha sido rechazado por el Tribunal Supremo (TS) por considerar que la atención particular es discriminatoria, tanto como separar a los niños en distintas clases.

La Generalitat ya ha respondido que no ejecutará la resolución sobre el castellano y ha avanzado que la recurriá ante el Tribunal Supremo (TS), y confía en que el alto tribunal le dé la razón.

Según Convivencia Cívica, el posicionamiento del TSJC afectará a una decena de centros en los cuales estudian los hijos de las diez familias recurrentes: cinco en la provincia de Barcelona, tres en las comarcas de Tarragona y otros dos en las gerundenses.