BARCELONA 21 Oct. (EUROPA PRESS) -
Los Mossos d'Esquadra, en colaboración con la Dirección General de Servicios Penitenciarios de la Generalitat, han detenido a un funcionario del centro penitenciario de Brians 2 en Sant Esteve Sesrovires (Barcelona), varios presos y personas externas a la prisión que formaban un grupo criminal dedicado a introducir hachís y heroína.
Las personas que se dedicaban a introducir la droga en prisión lo hacían escondiéndola dentro de su cuerpo, y eran principalmente allegados y presos que aprovechaban cuando tenían un permiso penitenciario, según ha informado este viernes la policía catalana en un comunicado.
Los detenidos son cinco hombres y una mujer de entre 22 y 40 años de nacionalidades española, peruana, argelina y marroquí, y de ellos dos han ingresado en prisión por estos hechos tras comparecer ante el juzgado, además de que se investiga a otros diez en esta causa.
La investigación arrancó en febrero cuando los sistemas de control de la prisión detectaron varias irregularidades y la Dirección General de Prisiones avisó a los Mossos, que arrestaron a un trabajador externo del centro que había introducido 800 gramos de hachís.
Además de introducir hachís y heroína, el grupo también facilitaba a los reos teléfonos móviles de pequeñas dimensiones.
PAGO EN UNA CUENTA
El 'modus operandi' consistía en que un intermediario detectaba internos que estuvieran interesados en adquirir la droga dentro del centro y les facilitaba un número de cuenta del traficante para que le hicieran un ingreso.
Una vez recibía el dinero, este intermediario se citaba con el familiar fuera del centro y le daba la droga para que se la hiciera llegar oculta en el cuerpo durante una visita o un 'vis a vis', además de que varios presos con permiso de fin de semana la ingerían y la recuperaban en el centro cuando realizaban sus necesidades fisiológicas.
Los funcionarios de prisiones pudieron interceptar hasta tres intentos de entrada de hachís y droga, uno por parte de la mujer arrestada en un 'vis a vis' y a otros dos reos tras un permiso de fin de semana.
El 4 de octubre los Mossos desplegaron un operativo en el que hicieron dos registros en L'Hospitalet de Llobregat y Sant Sadurní d'Anoia (Barcelona), y en cinco celdas del centro, donde en total se encontraron ordenadores, teléfonos móviles, dos kilos y medio de hachís, cuadernos con anotaciones y listas de pedidos, y 5.000 euros en efectivo.