La oposición critica que asuma obligaciones del Govern y Conesa defiende colaborar en estos servicios
BARCELONA, 1 Dic. (EUROPA PRESS) -
La Diputación de Barcelona ha aprobado este jueves inicialmente su Presupuesto para 2017, de 936,8 millones, cuentas que representan un incremento del 4,5% respecto al año anterior y que han prosperado con el apoyo del Gobierno de CiU y ERC y también del PSC, el rechazo de la CUP-PA y la abstención de Entesa --que incluye a BComú y los ecosocialistas--, PP y C's.
El Presupuesto --que deberá someterse a exposición pública tras esta aprobación inicial en pleno extraordinario-- prevé destinar 257,6 millones al apoyo directo de las entidades locales --169,1 de ellos vinculados al Pla de Xarxa de Governs Locals--; 73,1 millones a la promoción cultural, y 69,4 millones al desarrollo económico, que incluye un programa de fomento del empleo de 30 millones.
También prevé 50,8 millones para la mejora de carreteras locales y 46,7 para proteger el medio ambiente, además de 15 para el plan de choque contra la pobreza energética; 23,5 para guarderías; 10,5 para servicios sociales municipales; 5,3 para la teleasistencia, y seis para el transporte local escolar, con algunas partidas para servicios competencia de la Generalitat y que la Diputación cubre para garantizar su prestación.
La presidenta de la Diputación, Mercè Conesa, ha destacado en rueda de prensa tras el pleno que priorizan el desarrollo económico, el equilibrio territorial y, especialmente, la atención a las personas, a lo que el vicepresidente, el republicano Dionís Guiteras, ha señalado que pretenden que "todas las personas, vivan donde vivan, tengan las mismas oportunidades".
Conesa ha resaltado que están satisfechos por haber aprobado los Presupuestos, de los que ha asegurado: "Permiten poner la fortaleza económica de esta institución al servicio de los ayuntamientos y los ciudadanos, y colaborar de forma estratégica con el Govern para asegurar que las personas tienen la atención adecuada".
El diputado de Hacienda, Joan Carles García Cañizares, ha detallado en el pleno que las cuentas incluyen 96,4 millones para fomentar políticas sociales y la igualdad --con 81,75 para servicios de promoción social y 10,8 para políticas de salud pública-- y 132 millones para consolidar la corporación provincial como una administración pública transparente, mientras que prevé también 936 millones en ingresos --con 617 de la participación de tributos del Estado-- y un endeudamiento de 98,9 millones.
El republicano Jordi Fàbrega ha celebrado que el Presupuesto haya superado el primer trámite para su aprobación definitiva porque, sin él, la corporación provincial difícilmente podría cumplir con el plan de actuación de mandato, y ha lamentado que la CUP-PA haya rechazado las cuentas: "Estamos en un momento de transición nacional y tenemos que hacer piña".
CRÍTICAS DE LA OPOSICIÓN
Todos los grupos de la oposición han criticado que la Diputación prevea con el Presupuesto cubrir competencias del Govern que éste incumple e incluya transferencias a la Generalitat por valor de 18 millones, según los grupos, a lo que Fàbrega ha respondido: "Ojalá las finanzas de la Generalitat nos permitieran no tener que ayudarla, pero la realidad es la que es".
Preguntada por los medios, Conesa ha resaltado que este es un "momento excepcional en el que el Govern tiene dificultades importantes para hacer frente a algunos servicios" que reciben los ciudadanos, que quieren mantenerlos con independencia de quien los preste o los pague, algo en lo que ha coincidido Guiteras, que ha dicho que se cubren con impuestos que son de todos los ciudadanos, por lo que no entenderían que las administraciones no colaboraran para prestarlos.
La socialista Pilar Díaz, ha destacado que, si la corporación provincial no asumiera las obligaciones que incumple la Generalitat, los ayuntamientos tendrían más dificultades, pero ha advertido: "Si vamos tapando agujeros de otras administraciones, dejamos de tener un dinero que se podrían destinar a otros ámbitos".
El portavoz de Entesa, Arnau Funes, ha criticado estas aportaciones de la corporación provincial a servicios competencia del Govern y las transferencias a la Generalitat, partidas que cree que "pueden estar incluso hipotecando las políticas que la Diputación lleva a cabo con los gobiernos locales".
Desde C's, Salvador Tovar ha dicho que las cuentas prevén un aumento del 13% para cubrir obligaciones de la Generalitat, y ha avisado de que "es una irresponsabilidad que el pleno apruebe mociones para adherirse a organizaciones independentistas mientras la mayoría de ingresos provienen del Estado", a lo que el presidente del grupo, Miguel Ángel Ibáñez, ha añadido que no han votado a favor por las cuestiones identitarias.
El popular Manuel Reyes ha asegurado que se "trata de confundir las necesidades reales de los municipios con la construcción de un nuevo país" con este Presupuesto, que ha asegurado que tiene sombras pero también puntos positivos y ha incluido propuestas del PP, razón por la que ha explicado su abstención.
Desde la CUP-PA, Quim Duran ha sostenido que la negociación ha sido inexistente porque el ejecutivo tenía un patrón y un proyecto definido, condiciones en las que su grupo rechaza hacer propuestas, y ha aseverado: "Es difícil apoyar un Presupuesto de una institución que creemos que no debería existir tal como está concebida".