BARCELONA, 6 Jun. (EUROPA PRESS) -
La concejal de Ciutat Vella del Ayuntamiento de Barcelona, Gala Pin, ha informado que este miércoles se han producido cinco entradas a cinco pisos de distribución, consumo y venta de droga en el barrio de la Barceloneta (dos) y en el Raval (tres), que han finalizado con dos detenciones por parte de la Guardia Urbana en las viviendas de distribución de estupefacientes de la Barceloneta.
Pin ha explicado, en declaraciones a los medios, que desde principios de año se han realizado un total de 37 detenciones por venta y distribución de drogas, y que con las dos intervenciones en los pisos de la Barceloneta suman 83 desde el verano de 2017, pero "quedará por ver si hay más según avance la investigación" de los tres pisos en la calle Sant Climent en el Raval.
Desde la aplicación del plan de choque implementado este marzo, se han registrado un total de 2.576 identificaciones --teniendo en cuenta casos relacionados con venta y distribución de drogas y de otras tipologías--, 225 personas han resultado investigadas y de éstas, 34 han sido detenidas.
La concejal ha dicho que en los últimos meses se han intensificado las intervenciones por parte de Mossos d'Esquadra y Guardia Urbana en la zona de playa y ocio nocturno en materia de control de pisos de distribución de droga, resultado de la aplicación del plan de choque del distrito.
Asimismo, ha asegurado que se ha reforzado la presencia de efectivos, tanto de investigación como uniformados, y que en verano se verá la incidencia de esta iniciativa, y ha añadido que el Gobierno municipal trabaja para hacer macro operaciones sobre casos relacionados con el tráfico de drogas porque su objetivo es "conocer las redes que hacen que llegue la droga a Ciutat Vella, especialmente al Raval".
EL AYUNTAMIENTO Y LOS PROPIETARIOS
Pin ha asegurado que uno de los elementos que facilitan esta problemática en el Raval es que haya un amplio parque de vivienda vacío, ha exigido a los propietarios que se corresponsabilicen de ello y "se hagan cargo de sus propiedades", y ha puesto de manifiesto que existe una situación de emergencia habitacional en el barrio.
Ante esto, Pin ha añadido que el consistorio busca asegurar que cuando un piso es desalojado no se vuelva a ocupar, pero que a veces necesita el permiso de la propiedad para intervenir, y ha afirmado que el Ayuntamiento cuenta con un equipo destinado a detectar pisos vacíos en el Raval y el Gòtic --"susceptibles de convertirse en 'narcopisos'"-- que actúa y mantiene relación con los propietarios para anticipar ocupaciones.