BARCELONA 30 Dic. (EUROPA PRESS) -
Las estaciones de esquí catalanas afrontan la segunda parte de las vacaciones de Navidad, entre Fin de Año y Reyes, con buenas condiciones de nieve y la mayor parte de sus instalaciones abiertas.
Los máximos grosores de nieve se registran en la estación aranesa de Boí Taüll, donde oscilan entre los 55 y los 140 centímetros, y donde están abiertos todos los remontes y 44 de las 47 pistas.
La estación también de la Val d'Aran Baqueira Beret tiene 28 de los 35 remontes abiertos y 85 de 150 kilómetros esquiables, y los espesores de nieve se sitúan entre los 10 y los 30 centímetros.
Las estaciones del Grupo FGC --La Molina, Vall de Núria, Vallter, Espot y Port Ainé-- están teniendo "una de las mejores" Navidades de las últimas temporadas, gracias a las buenas condiciones meteorológicas y el buen estado de la nieve, que acumula grosores entre 15 y 55 centímetros, ha informado la compañía en un comunicado.
La Molina cuenta con el 88% de pistas abiertas y 54 kilómetros esquiables y la semana pasada ya abrió el 100% de las áreas esquiables; el dominio Alp 2500, formado por La Molina y Masella, ofrece un total de 108 kilómetros de pistas, lo que supone un 76% de los 142 kilómetros globales.
En La Molina, los espesores de nieve se sitúan entre los 15 y los 40 centímetros de nieve y en Masella oscilan entre los 25 y los 60 centímetros.
Vall de Núria, por su parte, tiene el 90% de sus pistas abiertas, con el 100% de remontes, y Vallter tiene todo el desnivel abierto con el 90% de los remontes operativos y grosores de entre 45 y 55 centímetros de nieve.
En el Pallars (Lleida), Espot cuenta con 22 kilómetros esquiables y cinco de los seis remontes abiertos, y Port Ainé dispone de 18 kilómetros esquiables y seis de los ocho remontes operativos.
También en Lleida, Port del Comte ofrece 34 pistas de las 37 en total, con 45 kilómetros esquiables y grosores que oscilan entre los 20 y los 45 centímetros de nieve.