Se suma al manifiesto fundacional el comisionado de cultura de Colau, Joan Subirats
BARCELONA, 21 Jun. (EUROPA PRESS) -
Exdiputados del PSC y Catalunya Sí Que Es Pot (SíQueEsPot) en el Parlament han creado el grupo 'Pròleg', una iniciativa de diálogo cívico que tiene por objetivo "promover una salida razonada a la crisis institucional en Catalunya y España por la vía de la negociación" y el incremento del autogobierno catalán.
El grupo nace de la firma de un manifiesto, recogido por Europa Press, que pone como segundo objetivo de este grupo "contribuir a la elaboración de una agenda política a nivel catalán y español que apunte al refuerzo de los derechos sociales y la reducción de las desigualdades".
Entre los firmantes se cuentan tres exdiputados de la confluencia SíQueEsPot en el Parlament que en la pasada legislatura aunó a Podem, ICV y EUiA: el presidente del grupo, Lluís Rabell, el portavoz, Joan Coscubiela, y la número dos de la lista a las catalanas, la escritora Gemma Lienas.
Otro de los firmantes de ese manifiesto es el comisionado de Cultura del Ayuntamiento de Barcelona liderado por Ada Colau, Joan Subirats.
A esta lista se suman exdiputados socialistas en la Cámara catalana como Laia Bonet y Josep Maria Vallès; el exsecretario general del PSC y exdiputado en el Parlament y el Congreso Raimon Obiols, y el presidente de Federalistes de Esquerres, Joan Botella.
También lo firman intelectuales como la exsenadora del PSC Victoria Camps, Jordi Amat, Marga Arboix y Marina Subirats.
CAMBIO DE GOBIERNO
Este grupo ve una ventana de posibilidades para Catalunya en el cambio de Gobierno tras la moción de censura que sustituyó en la Presidencia del Gobierno al popular Mariano Rajoy por el socialista Pedro Sánchez.
Considera que se ha abierto una oportunidad "para abordar cuestiones de interés general que habían quedado bloqueadas, aparcadas", y entre ellas destaca la de una nueva relación entre administraciones.
Los firmantes, que en su momento suscribieron un manifiesto en contra del encarcelamiento de dirigentes políticos independentistas, también destacan la necesidad de "corrección de la dinámica restrictiva de los derechos fundamentales".
Aseguran ser conscientes de que las cuestiones que plantean "no tienen una solución fácil ni inmediata" y requieren de una elaboración laboriosa de larga duración, pero se comprometen a preparar el terreno de esta elaboración, que aseguran que corresponderá a la ciudadanía, a sus representantes y a expertos.
Asumen ese compromiso con la premisa de que "la sociedad catalana es más diversa de lo que dan a entender las posiciones políticas más extremas", y apuestan por la tolerancia, el diálogo, y la transición como requisitos para abordar democráticamente cualquier conflicto social y político.