Se han comprado 15 nuevos trenes y la capacidad crece hasta 110 millones de viajes
BARCELONA, 15 Nov. (EUROPA PRESS) -
Ferrocarrils de la Generalitat de Catalunya (FGC) aumentará la frecuencia de la línea Barcelona-Valls hasta dos minutos y medio en hora punta hasta Sant Cugat (Barcelona), lo que significa que será de cinco minutos hasta Sabadell y Terrassa (Barcelona), según ha explicado la portavoz del Govern, Patricia Plaja, este martes en rueda de prensa posterior al Consell Executiu.
Este incremento se realizará a través de una nueva configuración de horarios y líneas que entrará en funcionamiento el próximo 9 de diciembre y que permite aumentar las frecuencias y dar respuesta al aumento de la demanda experimentado en los últimos años.
Esta modificación en la frecuencia permite aumentar la oferta de viajes hasta los 110 millones al año, teniendo en cuenta que el récord histórico son 66,3 millones en 2019.
Para lograrlo, FGC ha adquirido 15 nuevos trenes --con los que se alcanzan 61--, que incorporan "los últimos avances tecnológicos" y disponen de 196 asientos.
La nueva configuración elimina las líneas S6 Universitat Autnoma y S7 Rubí, que se prolongan hasta Sabadell y Terrassa, respectivamente, así como la S5 Sant Cugat, cuyas circulaciones son absorbidas por la S1 Terrassa y la S2 Sabadell.
De este modo se podrá "aumentar la capacidad de la línea y aprovechar al máximo la infraestructura", eliminando los trenes semidirectos que no hacían todo el recorrido de la línea.
MÁS FRECUENCIA
Además del aumento de frecuencias en hora punta, FGC aumentará durante el resto del día el paso de trenes a un tren cada diez minutos con origen o destino en Sabadell y Terrassa, lo que permitirá convertir la línea "en el primer metro real del área metropolitana".
En hora punta, el incremento de trenes será del 129% con Sabadell, del 92% con Terrassa, del 37% con la Universitat Autnoma, del 22% con Sant Cugat y del 20% con Rubí.
Esta nueva configuración ha sido posible por los trabajos realizados en la línea en los últimos años, que incluyen el alargamiento de los andenes de la estación de Plaa Catalunya de Barcelona, un sistema de entrada automática a esta estación o la construcción de nuevas subcentrales en Bellaterra y Rubí, entre otras.