BARCELONA, 23 Dic. (EUROPA PRESS) -
El Govern ha derogado este lunes el régimen para sancionar a los ayuntamientos y entes municipales por exceder el consumo de agua máximo durante la sequía.
En rueda de prensa, el presidente de la Generalitat, Salvador Illa, ha afirmado que la solución "no es poner multas" sino ayudar a los ayuntamientos ofreciéndoles más recursos económicos y técnicos.
En un comunicado, la Generalitat considera que la sequía se debe superar "con el esfuerzo de todos" y ha puesto en valor el compromiso de los municipios para mejorar sus redes de y su eficiencia, a raíz de las ayudas otorgadas por la Agència Catalana de l'Aigua (ACA), por 130 millones.
También se valora "de forma muy positiva" que desde finales de 2023 se ha multiplicado "por cinco" el número de municipios que disponen de una ordenanza de ahorro de agua: a finales de diciembre de 2023, solo 57 municipios tenían esta herramienta, y actualmente son 315.
El Ejecutivo catalán ha destacado que, ante estos esfuerzos por parte del mundo local, "mantener la tipificación de esta conducta como infracción es contraproducente en determinados supuestos", como es el caso de los municipios pequeños con recursos limitados y en situación de especial vulnerabilidad ante la sequía.
Cuando entre en vigor este decreto, "no se iniciarán nuevos procedimientos sancionadores" por exceso de dotaciones máximas para el abastecimoento de poblaciones en sequía, ni proseguirá la tramitación de los expedientes sancionadores iniciados por este incumplimiento.