Exigen cobrar lo mismo que los hombres por los trabajos en la cárcel
BARCELONA, 7 Mar. (EUROPA PRESS) -
Las internas del Centre Penitenciari de Dones de Barcelona (Wad- Ras) han reivindicado este viernes, con motivo del Día Internacional de la Mujer que se celebra el sábado 8 de marzo, que sus derechos como mujeres "sean respetados en la prisión y fuera de ella".
En un manifiesto que han escrito ellas mismas y que han leído este viernes en el salón de actos la prisión frente al conseller de Justicia y Calidad Democrática de la Generalitat, Ramon Espadaler, y el resto de autoridades y entidades, han manifestado que gracias al feminismo tienen hoy "más derechos y más espacios de libertad que nunca, pero todavía falta mucho camino por recorrer".
Las reclusas han evidenciado las desigualdades dentro y fuera de prisión, como la presión estética, y han exigido que "las compañeras trans sigan siendo reconocidas como las mujeres que son", en un manifiesto que ha terminado con un mensaje de sororidad instando al centenar de mujeres presentes en la sala a seguir avanzando juntas.
Asimismo, han recordado a mujeres que, por su trayectoria y porque "desafiaron las reglas", consideran que deben ser recordadas: a Policarpa Salavarrieta, espía que luchó por la independencia de Colombia, y a Selena Quintanilla, cantante, empresaria y diseñadora, por desafiar a una industria de hombres.
También a Juana Rivas, por evidenciar "que el sistema no garantiza la seguridad de las víctimas"; a la futbolista Alexia Putellas, por demostrar que las mujeres pueden llegar a lo más alto, y a sus propias madres, por ser referentes en sus vidas, en sus palabras.
Una de ellas ha interpretado un rap sobre la violencia de género y el grupo de educación física ha hecho una coreografía en la que las internas han danzado tras el rostro de una mujer, que han pintado en colores morados.
SEIS PREMIADAS
En el acto, Judit Mascó, presidenta de la Fundació Ared, que nació como asociación en este mismo centro penitenciario y que ofrece formación y acompañamiento para que las internas puedan encontrar un empleo digno cuando abandonen la prisión, ha hecho entrega de seis premios.
Estos galardones, que se entregan desde hace 14 años, tienen como objetivo reconocer el "esfuerzo, sensibilidad y superación de las mujeres privadas de libertad", en palabras de la presentadora.
Las internas galardonadas --que han recibido un diploma y 100 euros cada una-- han recogido esta gratificación de manos de Mascó y Espadaler y han sido elegidas por sus compañeras como merecedoras de los premios a la mujer trabajadora, emprendedora, mujer con liderazgo positivo, buena compañera, luchadora y resistente, y con capacidad de superación.
Una de las internas, Laura, ha explicado que hace unos años ella misma recibió el premio de liderazgo positivo por ayudar a sus compañeras con positividad y por acompañarlas en los malos momentos: "Ya sabemos que estamos en una prisión y todas lo estamos pasando mal, pero este dolor tienes que tomártelo de forma positiva y hacerle frente", ha manifestado en declaraciones a los medios.
Otra de las internas, Joana, que este viernes celebraba la noticia de que le ha sido otorgado el tercer grado, ha dicho que ella recibió este reconocimiento en el pasado en la categoría de superación: "Yo entré aquí realmente muy mal y durante un tiempo no veía mucha salida, pero después me di cuenta de que cambiando la actitud y con un poquito de esfuerzo se podían cambiar muchísimas cosas".
Además, esta interna ha explicado que en Wad-Ras es posible reeducarse porque "hay herramientas y elementos como para conseguirlo" y que estos premios buscan precisamente recompensar este esfuerzo de alguna manera, en sus palabras.
DIFERENCIA SALARIAL
Laura ha aprovechado para pedir que el salario de las mujeres en prisión se equipare al de los hombres reclusos, y ha afirmado que los "internos en otras prisiones cobran más" que ellas y que sus sueldos dan risa, textualmente.
En este sentido, ha dicho que por 6 horas de trabajo diarias como encargada del economato de la prisión y trabajando en talleres cobra un salario de entre 350 y 400 euros mensuales, a lo que fuentes de la Conselleria de Justicia han dicho que el trabajo en prisión tiene como objetivo que las internas adquieran los hábitos laborales y está enfocado a la reinserción.
También han explicado que el precio por hora trabajado es igual para todo el mundo, hombres y mujeres, pero que cada centro penitenciario se autoorganiza y tiene la potestad para repartir la carga de trabajo como considere, de forma que en algunos centros los presos pueden cobrar un poco más que en otros porque trabajan más horas.
Aun así, desde la Conselleria de Justicia se han comprometido a hacer una "labor de armonización", para que si todavía queda algún desequilibrio salarial entre hombres y mujeres sea solventado lo antes posible.
DOBLE "INVISIBILIDAD"
Por su parte, Espadaler, se ha mostrado agradecido por poder compartir esta celebración con las internas de Wad-Ras y ha manifestado que a veces "no somos plenamente conscientes de la invisibilidad que sufren las mujeres", que en este caso, ha dicho, es doble: por el hecho de ser mujeres y por estar privadas de libertad.
Espadaler ha recitado un texto de Virginia Wolf sobre las tareas domésticas que evidencia "la invisibilidad de las mujeres durante décadas, durante siglos" y ha animado a las internas a que crean en sí mismas porque vale la pena, en sus palabras.
Posteriormente, el conseller ha visitado la exposición que han elaborado las reclusas con motivo del 8M en uno de los pasillos, en el que han colgado varios murales elaborados con imágenes creadas con un programa digital, y en el que se han hecho una selección de libros feministas; después, han disfrutado de una comida que han preparado la Fudació Ared y el propio centro.