GIRONA, 31 May. (EUROPA PRESS) -
El Juzgado de Instrucción 2 de Santa Coloma de Farners (Girona) ha abierto una investigación por un presunto delito de homicidio imprudente contra los dueños del restaurante de Caldes de Malavella (Girona) que tenía instalado un castillo hinchable en el que murió una menor y otros niños resultaron heridos al sufrir un accidente.
El juez ha abierto diligencias por un presunto delito de homicidio imprudente y lesiones por imprudencia grave, y está previsto que los propietarios del establecimiento declaren en calidad de investigados el 27 de junio, según la auto consultado por Europa Press.
Los padres de los menores afectados deberán declarar el 11 de julio y la treintena de testigos del caso lo harán el 27 de junio y el 18 de julio.
En su auto, el juez pide realizar un reconocimiento forense a los seis menores que resultaron lesionados al salir volando el hinchable en el que estaban jugando, el domingo 7 de mayo.
Asimismo, insta al Grupo de ingeniería forense de la Comisaría General de la Policía Científica de Madrid que realice un informe pericial sobre las causas y la mecánica del accidente y de las medidas de seguridad adoptadas.
Reclama al Ayuntamiento de Caldes que le remita un informe respecto a las autorizaciones, permisos, licencias o cualquier otra documentación municipal necesaria para ubicar un castillo hinchable, y las autorizaciones o licencias necesarias para un negocio de hostelería.
Según explicó en su día el alcalde de Caldes, Salvador Balliu, el castillo hinchable no tenía permiso municipal y por esto la Dirección General de Administración de Seguridad de la Generalitat abrió un expediente informativo tras el accidente.
Según fuentes cercanas a la investigación, el castillo hinchable pudo haber salido volando y recorrer 40 metros porque una de las cremalleras laterales estaba sin cerrar y dejó salir el aire repentinamente y la atracción solamente tenía fijados dos de sus anclajes.