Foto: PENGUIN RANDOM HOUSE/NIKLAS R.LELLO
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BARCELONA, 20 Oct. (EUROPA PRESS) -
El autor noruego Jo Nesbo se asoma a la "naturaleza del mal" en el thriller 'El leopardo' (Penguin Random House/Proa), protagonizado por el comisario Harry Hole.
"He escrito sobre asesinos en serie en novelas anteriores, pero en ésta, como en 'El muñeco de nieve', me acerco más a la naturaleza del mal", ha explicado en una entrevista de Europa Press este lunes.
Para Nesbo, el objetivo de la ficción no es dar respuestas, sino formular preguntas y sugerir vínculos: "Como escritor he intentado formular las preguntas adecuadas sobre la naturaleza del mal".
Como las novelas sobre monstruos no hablan de éstos, sino de la gente que se enfrenta a ellos, 'El leopardo' es "una metáfora en la que el monstruo es un símbolo donde están los miedos y la autocompasión" de cada uno.
La historia está protagonizada por su comisario Harry Hole, que, tras retirarse del mundo y estar inmerso en una espiral autodestructiva, se ve empujado por el brutal asesinato de dos mujeres torturadas con una máquina conocida como la manzana de Leopoldo.
Para Nesbo, esta novela es la más compleja que ha escrito "desde una perspectiva humana", mientras que 'El pitirrojo' lo ha sido desde un punto de vista político, ha señalado.
Su interés era tratar sobre seres humanos del día a día, mezcladas con personas que tienen alguna perturbación en su personalidad, como un asesino en serie, comparado con la sigilosidad de un leopardo: "Es el cazador perfecto, está siempre cerca de ti sin que te des cuenta".
Sin embargo, el título original de la novela es 'Armoured heart' en referencia a la opresión y falta de oxígeno del corazón y los pulmones en una avalancha de nieve, ha contado.
LA MANZANA DE LEOPOLDO
Este instrumento (una bola que se coloca en el interior de la boca y de la que salen espeluznantes punzones al intentarla sacar), es una idea que, "sorprendentemente", viene de un recuerdo de infancia cuando, junto a su hermano, visitaron el jardín de su abuela, donde había manzanos y, como la mujer no les dejaba coger la fruta, se retaron a comerla directamente: "Ella no decía nada de comer, sino de coger".
"Un día me comí una muy grande, no la podía sacar, de modo que yo estaba colgado en la rama del árbol pensando en que, si me quedaba allí algunos días y la manzana crecía, ¿explotaría mi cabeza?", ha relatado.
Sobre el protagonista, con el que ya lleva diez novelas, es "como cualquier ser humano", y cuánto más le conoce, más curiosidad siente hacia él, ha explicado Nesbo, convencido de que los lectores empatizan con el comisario, con quien desean viajar a lugares oscuros.
DOS INTENTOS
"Ni me acordaba de que había hecho dos intentos de escribir esta novela", ha exclamado Nesbo, aunque ha asegurado que siempre realiza varias versiones de sus novelas a las que después quita páginas no esenciales.
Para el autor, en literatura siempre hay cosas a modificar, pero llega un momento en el que hay que poner punto y final, y que en su caso ha sido un proceso de dos años desde la gestación de la idea, en combinación con otros proyectos.
El autor se reunirá este lunes con sus fans este lunes a las 20 horas en la Biblioteca Jaume Fuster de Barcelona, en un encuentro abierto y gratuito.