Asegura que siempre ha sido nacionalista pero no independentista
BARCELONA, 1 (EUROPA PRESS)
El expresidente de la Generalitat Jordi Pujol ha afirmado este viernes que no es corrupto y ha añadido: "Por la gran mayoría de mi familia sí que pondría la mano en el fuego".
"Ni yo ni en general mis hijos han prevaricado ni nada de esto", ha defendido en una entrevista de Ser Catalunya recogida por Europa Press, que ha definido como una excepción porque hace años que no concede ninguna.
Al ser preguntado por si le duele que le digan corrupto, ha contestado que sí porque cree que nadie puede demostrarlo: "A mí que me venga una persona, o el Gobierno del Estado o el Fiscal General, que me diga que soy corrupto. Le diré: 'escuche, dime en qué caso yo he actuado de manera corrupta'. He tomado decisiones, claro que he tomado decisiones. A veces favorecen a unos o a otros".
"Tú tienes que tomar decisiones que no todo el mundo queda de acuerdo. Pero las tienes que tomar. Lo que sí que es importante es que tu no cobres ni una peseta", y ha garantizado que en este sentido él no ha cobrado nunca.
Sin embargo, preguntado por si su familia ha cobrado algo, ha contestado que no lo sabe: "Alguna persona puede hacer algo. No todo ha ido suficientemente bien, ya se lo admito. Pero por la gran mayoría de mi familia sí que pondría la mano en el fuego".
Así, ha sostenido que tanto periodistas como jueces o fiscales pueden ir hurgando pero que no encontrarán mucho: "No encontrará demasiadas cosas y de mí nada. Y de casi todos de mi familia también nada".
"VIVO INSTALADO EN EL DOLOR"
Sobre si sufre más por él o por su familia, ha contestado que por su familia "y por Catalunya", y ha señalado que afronta la causa judicial con fortaleza y esperanza.
Preguntado por si se arrepiente de su confesión hace ocho años de que tenía dinero en Andorra sin declarar procedente de una herencia de su padre, ha dicho que la situación es "penosa" para él y que desde entonces vive en el dolor.
"Yo vivo instalado en el dolor. Pero en cambio, mantengo la esperanza. Si yo pierdo la esperanza me moriré", y al ser preguntado por la conocida como 'Operación Catalunya', considera que hace tiempo que se sabe que, según él, hubo un intento de perseguirlo políticamente y cree que trataron de perjudicarle tanto a él como a todo lo que representaba.
"EL PAÍS ESTÁ TRISTE"
El expresidente de la Generalitat ha asegurado que desde los 14 años ha sido nacionalista: "No he sido independentista", y ha recordado que cuando dirigía CDC y había algún joven con la bandera 'estelada' el le decía que la bandera de Catalunya es la 'senyera'.
Según él, en CDC eran defensores de la identidad en Catalunya pero siempre pensaron "que esto se podría hacer dentro del Estado español".
Ha destacado que él se aproximó a la política española y que nunca ha considerado que España sea un país poco importante, aunque cree que "es un país que trata de ahogar al que tiene al lado" y lo ve parecido a Rusia.
Sobre cómo ve Catalunya ahora, Pujol ha contestado que políticamente vive "un momento de crisis" pero que en otros aspectos, como la economía, la cultura y la investigación, va bien.
"Que la política vaya mal y que España tenga realmente una actitud hostil, que frecuentemente la ha tenido pero últimamente la tiene de una manera especial, esto nos hace daño. Pero el país, pese a todo, está vivo", ha subrayado.
Asimismo, ha advertido de que "el país está triste" porque políticamente cree que no acaba de funcionar bien, pero ha expresado su confianza en que esto se superará.
"Lo primero que hay que hacer es ordenar la casa. Cuando vuelves a casa después de estar fuera dos o tres años, ha entrado gente y han cambiado la cosa y hace falta ordenar la casa. Y ordenar la casa es la política", pero ha añadido que él no puede hacerlo porque, a su juicio, su tiempo ha pasado.
Pujol ha recalcado que tiene 92 años, que no le extrañaría vivir cinco o seis más y que le da "respeto" la muerte .
GUERRA DE UCRANIA
Además, ha alertado de que le da miedo la situación actual, con la guerra en Ucrania y la tendencia de las principales potencias de aumentar sus presupuestos de Defensa, porque cree que está habiendo un proceso parecido al que hubo antes de las dos guerras mundiales, aunque cree que la Otan está haciendo lo que debería hacer.
"Estamos en un punto en el que hay que ir por el camino peligroso que llevó a la Primera y a la Segunda Guerra Mundial. Pero no pueden llegar a una situación de este tipo indefensos", por lo que entiende que el Gobierno apueste por aumentar el gasto en Defensa.