BARCELONA 23 Abr. (EUROPA PRESS) -
Los gremios de libreros, panaderos y floristas se han unido a las puertas de la fiesta para reivindicar la Diada de Sant Jordi y pedir a la población que se dirija al comercio de proximidad, en una fiesta que piden que sea cada vez más sostenible y cercana.
"A nadie se le escapa que Sant Jordi tiene la fuerza de una fiesta popular, porque se fundamenta en los sentimientos y no en el negocio", dijo el vicepresidente del Gremio de Libreros, Pere Fàbregues, en un acto con el Consejo General de Gremios de Catalunya este jueves.
Opinó que el día en que los comercios solo piensen en hacer caja el pueblo les girará la espalda, y ha destacado que una comisión china visitará la Diada porque "quiere exportar la fiesta del libro" a una de sus ciudades.
Para Fàbregas, Sant Jordi es una "jornada culta, multitudinaria e indestruible", y se ha alineado con las declaraciones recientes del Gremio de Floristas de Catalunya, que reclama una ordenanza para perseguir a paradas "mercantilistas" promovidas por empresas y que al día siguiente no responden por nada.
Desde el Gremio de Panaderos de Barcelona, Jaume Bertran, reivindica la tradición del Pan de Sant Jordi inspirado en la 'senyera', de queso, nueces y sobrasada, y vendido en comercios de proximidad.
El presidente del Gremio de Floristas, Joan Guillén, consideró Sant Jordi la fiesta más multitudinaria de Europa, y agradeció el trabajo de la Guardia Urbana y cuerpos de seguridad: "Gracias a ellos podemos estar hablando de flores y libros, y de nada más al final de la jornada".
COMERCIOS ABIERTOS
Con motivo de la Diada, el Consejo de Gremios de Catalunya pidió al Ayuntamiento que se pudieran abrir los comercios este año por caer en domingo, algo que el consistorio ha aceptado.
Para la concejal de Comercio de Barcelona, Montserrat Ballarín, Sant Jordi es un "día inolvidable" para el que se ha hecho mucho esfuerzo para distribuir la gran presión existente para ocupar el espacio público.