En marcha la reunión de Illa y Marlaska en el marco de la Junta de Seguridad de Catalunya

Ministerio y Conselleria de Interior niegan la cesión de competencias a Mossos en puertos y aeropuertos

BARCELONA, 5 Dic. (EUROPA PRESS) -

El presidente de la Generalitat, Salvador Illa, y el ministro del Interior, Fernando Grande- Marlaska están reunidos este jueves en Barcelona en el marco de la Junta de Seguridad de Catalunya.

Tanto el Ministerio del Interior como el Departamento de Interior y Seguridad Pública de Catalunya han negado que uno de los puntos de esta Junta sea la negociación para la cesión a los Mossos d'Esquadra de las competencias de protección de las personas y bienes y del mantenimiento del orden público en puertos y aeropuertos de Catalunya.

En la reunión, que ha comenzado a las 9 de la mañana en el Palau de la Generalitat, también participan por parte del Gobierno el secretario de Estado de Seguridad, Rafael Pérez; el delegado del Gobierno en Catalunya, Carlos Prieto; el director general de Coordinación y Estudios del ministerio, José Antonio Rodríguez, y el secretario general técnico del departamento, Juan Antonio Puigserver.

Por parte del Govern de la Generalitat, asisten el secretario general del departamento de Interior, Tomás Carrión; el director general de la Policía, José Luís Trapero, y el jefe de la Asesoría Jurídica de la Dirección General de la Policía, Alex Bas, y cuando finalice la reunión el ministro y la consellera de Interior y Seguridad Pública, Núria Parlon, comparecerán ante los medios.

LUCHA CONTRA LA MULTIRREINCIDENCIA

El encuentro entre Govern y Gobierno se produce después de que, el miércoles, el ministro de Presidencia, Justicia y Relaciones con las Cortes, Félix Bolaños; el alcalde de Barcelona, Jaume Collboni, y el conseller de Justicia y Calidad Democrática, Ramon Espadaler, presentaran un plan de choque para luchar contra la multirreincidencia tras una reunión con el presidente de la Generalitat, Salvador Illa.

El plan estará en marcha el primer trimestre de 2025 y prevé la creación de cinco nuevos juzgados en Barcelona --4 de lo penal y uno de instrucción-- para combatir la multirreincidencia y reducir los plazos de los juicios rápidos y que la Guàrdia Urbana pueda acceder a una herramienta informática para saber saber si un detenido es multirreincidente o no en tiempo real y el juzgado al que debe dirigirlo.