Marín abre la puerta a dejar sin edificar la zona cultivada de Cal Trabal en L'Hospitalet

Núria Marín
EUROPA PRESS
Actualizado: domingo, 16 octubre 2016 11:15

La alcaldesa recuerda que la primera reforma de la Granvia también tuvo sus detractores

L'HOSPITALET DE LLOBREGAT (BARCELONA), 16 (EUROPA PRESS)

La alcaldesa de L'Hospitalet de Llobregat, Núria Marín, considera "factible" una modificación del Plan Director Urbanístico (PDU) de la Granvia para dejar completamente sin edificar la zona cultivada del sector de Cal Trabal, tal como reclaman algunas de las alegaciones presentadas contra el proyecto.

En una entrevista de Europa Press, Marín ha manifestado que "todas las alegaciones presentadas se estudiarán y, posiblemente, algunas de ellas se tendrán en consideración, total o parcialmente, siempre que mejoren el planeamiento publicado, porque siempre hay margen de mejora".

En este sentido, la alcaldesa ve factible la propuesta elaborada por la Asociación de Vecinos de Bellvitge para que no se coloque ningún edificio en el área comprendida entre el camino al río Llobregat y Cal Trabal, de forma que una hectárea de zona cultivada actualmente afectada por el plan quedaría libre de edificios.

"Me consta que la Asociación de Vecinos de Bellvitge ha hecho una propuesta que, si se tiene en cuenta esta alegación, posiblemente puede mejorar un poco más este plan que es un proyecto estratégico no sólo para L'Hospitalet sino para toda Catalunya", ha señalado Marín.

El pasado 8 de octubre finalizó el periodo de información pública del Plan Director Urbanístico Granvia-Llobregat, que prevé la transformación de un tramo de un kilómetro de la autovía C-31 a la altura del Hospital de Bellvitge, la creación de un parque de 28,5 hectáreas y la definición de nuevos polos de actividad económica vinculados al sector de la biomedicina.

ALEGACIONES CONTRA EL PLAN

El plan ha recibido alegaciones por parte de diferentes grupos municipales, como C's, que reclama una suspensión de la aprobación definitiva y la celebración de una consulta ciudadana; el PP, que plantea reducir la edificabilidad en la zona de Cal Trabal; ICV-EUiA-Piratas y la CUP, que piden la paralización definitiva del plan, y ERC, que plantea suprimir los edificios previstos en el sector de Cal Trabal.

También han presentado alegaciones la Asociación de Vecinos Independiente de Bellvitge, las entidades ecologistas Depana y La Saboga y la Asamblea No més blocs, que piden la paralización del proyecto, y ahora el plan está sometido hasta principios de noviembre al trámite de audiencia al Ayuntamiento de L'Hospitalet.

Frente a las alegaciones contrarias al plan, la alcaldesa de L'Hospitalet ha asegurado que el PDU Granvia tendrá "un gran beneficio para la ciudad ya que supondrá la creación de un parque en una zona que ahora es privada, la recuperación del río y del patrimonio histórico y la depresión de la Granvia para que todo ese espacio sea atractivo para las empresas del sector biomédico".

Marín ha recordado que la primera reforma de la Granvia y la creación de la plaza de Europa también fueron al inicio un proyecto criticado que ha acabado siendo un "éxito", y ha descartado someter a consulta ciudadana el plan director urbanístico en su conjunto.

CAMBIOS EN CAN RIGAL

Al norte de L'Hospitalet, la ciudad tiene pendiente otra actuación urbanística de gran envergadura, el plan de Can Rigal, que se aprobó en 2006 para la transformación de un espacio de 250.000 metros cuadrados junto a la carretera de Collblanc y limítrofe con los términos municipales de Barcelona y de Esplugues de Llobregat, que quedó aparcado debido a la crisis económica.

La alcaldesa de L'Hospitalet ha explicado que el Ayuntamiento ha hablado con el Fútbol Club Barcelona y con el resto de propietarios sobre el planeamiento de Can Rigal, ya que actualmente es "insostenible", según Marín, por el coste que supondría trasladar la subestación eléctrica de Endesa.

"Tendríamos que ser capaces de reinventar y rediseñar todo el proyecto para hacer un plan viable, posible y realista, porque si tienes un plan excelente, pero inasumible económicamente, nadie te vendrá a realizarlo", ha apuntado.

En cuanto a la situación de la masía de Can Rigal, la alcaldesa ha manifestado que están negociando con el Fútbol Club Barcelona para garantizar la conservación del edificio y que la solución podría pasar por "sacar la masía del plan urbanístico y ver cómo se puede actuar lo antes posible para preservarla".