Muestran su apoyo a la prohibición de móviles en Primaria y su restricción en Secundaria
BARCELONA, 15 Oct. (EUROPA PRESS) -
El Col·legi Oficial de Metges de Barcelona (COMB) ha recomendado a las familias no proporcionar un primer móvil inteligente hasta los 16 años y evitar la exposición a las pantallas y las redes a los menores de 6 años.
En el documento 'La protección digital de menores y adolescentes', presentado este martes, el COMB señala que si el menor necesita una herramienta para comunicarse en casos de emergencia antes de esta edad se consideren dispositivos no inteligentes.
El COMB recomienda, antes de proporcionar el primer teléfono inteligente, configurar la red doméstica y los dispositivos con sistemas de protección parental para filtrar contenidos y aplicaciones, gestionar las ventanas de uso de los dispositivos y proteger el descanso.
También recomienda establecer un 'contrato tecnológico' que establezca los límites, el uso, el reconocimiento del valor económico del dispositivo y las obligaciones en el uso por parte del menor, y evitar que el móvil se convierta en "moneda de cambio/castigo" y los planes de datos ilimitados.
Los expertos han reclamado a las administraciones que, desde el ámbito normativo, se obligue a desplegar de forma urgente sistemas o estrategias de "verificación de mayoría de edad" en los diferentes servicios digitales, redes sociales, aplicaciones y juegos en línea.
"ALERTADOR FIABLE"
El COMB ha propuesto que la Generalitat promueva la figura del "alertador fiable" en áreas estratégicas donde el contacto con los usuarios menores es más directo, como Educación y Salud.
Los médicos de Barcelona recomiendan que, en el ámbito regulatorio de servicios de telecomunicaciones, se debe promover que los operadores que ofrecen servicios de conectividad a escala residencial-familiar faciliten herramientas de protección parental y que incorporen el parámetro 'menor de edad' a la hora de proveer servicios.
El COMB ha mostrado su apoyo a la prohibición del uso de teléfonos inteligentes en los centros escolares de Infantil y Primaria y el uso restrictivo en Secundaria, con "el establecimiento de espacios libres de móviles para reforzar la socialización", así como a promover y apoyar iniciativas dirigidas a reducir la presión social hacia la adopción del primer teléfono inteligente.
En el ámbito de la salud, el documento recoge la recomendación de incorporar cuestionarios para la detección de conductas de riesgo en las revisiones pediátricas, promover la divulgación de los riesgos asociados al mal uso de pantallas y hacer del pediatra un referente para las familias también en temas de protección digital.