La secretaria de Millet sacaba dinero de la caja fuerte en las visitas de un extesorero de CDC
BARCELONA, 6 (EUROPA PRESS)
El extesorero de CDC Daniel Osàcar dejó al Palau de la Música al menos dos encargos telefónicos para que el 'número dos' de la institución, Jordi Montull, telefonease al entonces directivo de Ferrovial Juan Elizaga --los tres están acusados en la causa--.
Lo desvelan dos anotaciones de agenda de Montull del 22 y 29 de enero de 2008: en la sesión de este jueves del juicio del caso Palau, su entonces secretaria Rosa Maria Roca ha confirmado que las escribió ella para avisar a Montull de que Osàcar le había llamado y de lo que éste quería.
El fiscal considera que CDC --ahora refundada en el PDeCAT-- utilizó el Palau para camuflar comisiones ilegales que el partido presuntamente cobraba a la constructora a cambio de adjudicársele obras públicas desde las instituciones públicas que controlaba.
Roca ha explicado que Osàcar --citado reiteradamente en las agendas-- llamaba de vez en cuando a Montull y, cuando éste no estaba, ella anotaba quién llamaba y qué quería, como sucedió cuando el entonces tesorero convergente le comentó que telefonease a Elizaga: "Se me dio esa indicación y yo se la di al señor Montull".
"Apunté lo que se me dijo por parte de quien llamaba", ha dicho la que era una de las tres secretarias que trabajaban para Montull, y también ha explicado que en estos dietarios apuntaban muchas reuniones que tenía previstas aunque no todas: otras sólo las anotaba el propio Montull en una pequeña agenda que siempre llevaba en el bolsillo de la camisa.
SOBRES PARA EL TESORERO
Osàcar trataba habitualmente con el Palau a través de Montull, mientras que su antecesor como tesorero Carles Torrent --que murió en 2005-- lo hacía directamente con el presidente del Palau, Fèlix Millet.
Una de las secretarias de Millet, Pilar Casanovas, ha explicado como testigo que Torrent telefoneaba al presidente y, de vez en cuando, se reunía con él en la institución, adonde acudía en un coche que aparcaba en la puerta mientras algún trabajador del Palau se encargaba de vigilarlo.
A preguntas del fiscal, Casanovas ha admitido que la secretaria personal de Millet, Elisabeth Barberà, iba a la caja fuerte a coger sobres algunas de las veces en que Torrent estaba en el Palau: "Voy a la caja un momento", asegura que le decía Barberà antes de estas reuniones.
En la sesión del juicio también se ha exhibido una carta de Millet a Torrent en que pedía al tesorero de Convergència hacer un esfuerzo con Ferrovial.
También, a petición del fiscal, se ha exhibido tanto a Rosa María Roca como a Eugènia Morante --otra secretaria de Montull-- varios documentos incautados en los ordenadores sobre facturas y otros cuadros de pagos sospechosos.
Al preguntársele si no les extraña el tipo de anotaciones, ambas han defendido que se limitaban a pasar a ordenador lo que Montull les daba manuscrito y no pedían explicaciones, y Morante ha dicho: "Yo lo que pensé en ese momento no lo sé. No lo cuestionaba. Me lo daba Montull y yo lo picaba".