Las obras de prolongación de la L8 cortarán la calle Urgell de Barcelona en 2 tramos durante un año

Archivo - Mapa de la prolongación de la L8 de los Ferrocarrils de la Generalitat de Catalunya (FGC) en Barcelona.
Archivo - Mapa de la prolongación de la L8 de los Ferrocarrils de la Generalitat de Catalunya (FGC) en Barcelona. - GENERALITAT DE CATALUNYA - Archivo
Publicado: miércoles, 11 diciembre 2024 13:59

Se eliminará un carril de la Diagonal en sentido Besòs entre Numància y Macià

BARCELONA, 11 Dic. (EUROPA PRESS) -

Las obras de prolongación de la L8 de Ferrocarrils de la Generalitat de Catalunya (FGC) obligarán a cortar la calle Comte d'Urgell de Barcelona entre las calles Rosselló y Còrsega y entre la plaza Francesc Macià y la calle Buenos Aires durante aproximadamente un año.

Fuentes de la Generalitat y el Ayuntamiento de Barcelona han explicado este miércoles que los cortes se iniciarán el 20 de enero de 2025 en el caso de la calle Rosselló y el 23 de febrero en Francesc Macià.

La voluntad es que las obras duren aproximadamente un año --aunque existe la intención de intentar acabarlas antes de las Navidades de 2025 --a pesar de las dificultades para poder prever los tiempos de los trabajos en el subsuelo.

El incremento de la ocupación necesaria en superficie respecto a los trabajos que se están realizando en Urgell con Consell de Cent se debe a que la maquinaria es de mayor tamaño por la necesidad de hacer pantallas de 82 metros de profundidad.

En ambos casos, los peatones podrán seguir utilizando las aceras, y los vados afectados requerirán un traslado de las plazas en el caso del corte de Rosselló y una salida alternativa en el caso de Francesc Macià --donde el único afectado corresponde a la torre del Grupo Godó--.

DESVÍOS DE TRÁFICO

El Ayuntamiento de Barcelona ha previsto desvíos de tráfico para dar alternativa a los cerca de 32.000 vehículos que pasan diariamente por el corte de Rosselló y los cerca de 18.000 que pasan por el de Francesc Macià.

En el primer caso, se desviarán los vehículos que suben desde el barrio de Sant Antoni por Rosselló hasta la calle Calàbria, mientras que el que viene de la calle Aragó a través de la avenida Roma se desviará por las calles Aribau y Casanova.

Se ha calculado que las dos alternativas llevarán estas vías al límite de su capacidad, pero las fuentes han explicado que ninguna calle de Barcelona puede recibir a todos los vehículos afectados por el corte.

En el itinerario de entrada a la ciudad, el Ayuntamiento ha previsto reforzar el giro desde el tronco central de la Diagonal hacia la calle Numància, con la obligatoriedad de hacerlo en dos de los tres carriles, y cortará un carril de la Diagonal entre Numància y Francesc Macià para hacer más evidente la necesidad de girar.

Estos vehículos deberán bajar hasta la calle París para seguir su camino hacia el Eixample y la zona norte de la ciudad.

Además, se habilitará un carril de bajada en el primer tramo del lado mar de la avenida Josep Tarradellas para permitir el giro hacia la calle Comte Borrell y el posterior giro hacia la calle Buenos Aires.

RUIDO DURANTE UN AÑO

A diferencia de las obras en el cruce con Consell de Cent, en estos dos ámbitos se instalarán pantallas acústicas de tres metros de altura alrededor de los trabajos y otras de seis metros en los laterales y la parte trasera de la hidrofresa.

A pesar de la mejora de rendimiento prevista por la mayor proximidad con la fuente del ruido, está previsto que las obras provoquen ruidos al máximo del límite medioambiental durante su duración.

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