La previsión puede mejorar hasta rondar el 3% dependiendo de las incertidumbres
BARCELONA, 20 Dic. (EUROPA PRESS) -
BBVA estima un crecimiento del PIB catalán del 3,5% este año --frente a una horquilla entre el 2,9% y el 3,3% calculado en julio-- pero prevé una desaceleración para 2017 hasta el 2,5% (en julio estimaba entre el 2,7% y el 2,3%), según el informe 'Situación Catalunya' de BBVA correspondiente al segundo semestre.
En rueda de prensa, el responsable de Análisis Macroeconómico de BBVA Research, Rafael Doménech, ha explicado que en 2017 la renta per cápita catalana se situará dos puntos por encima del nivel de antes de la crisis, pero solo se habrá recuperado el 50% del empleo destruido: "La mejor manera de recuperarlo es reducir incertidumbres y continuar reformas que reduzcan la vulnerabilidad y contribuyan al bienestar general".
La economía catalana suma cuatro años consecutivos de crecimiento gracias a la recuperación de la demanda interna y del gasto público, así como al dinamismo del sector turístico, que sigue marcando nuevos récords ayudado por la captación de visitantes que evitan tensiones geopolíticas en países competidores, ha indicado Doménech, que ha señalado que "es un viento de cola que no va a soplar con más intensidad" porque ya ha alcanzado su punto álgido.
El banco augura una desaceleración para el próximo año por los riesgos del Brexit (con un impacto de cuatro décimas en el PIB catalán, en línea con el conjunto de España, por su posible afectación al comercio, el turismo, la inversión y las finanzas), la revisión a la baja del crecimiento mundial, la política monetaria --que no puede hacer más que aumentar tipos de interés-- y el tono menos expansivo de la política fiscal, políticas que hacen prever un menor dinamismo del consumo.
EMPLEO
El informe también calcula que la economía catalana creará 210.000 empleos entre 2016 y 2017, 5.000 menos que en la previsión de hace seis meses, reduciendo la tasa de paro por debajo del 12,5% (en julio se estimaba el 12,8%) a finales del próximo año, seis puntos por encima de los niveles anteriores a la crisis.
Doménech ha atribuido estas diferencias a la actualización de los datos respecto a empleo y población activa, por lo que ha descartado relevancia estadística, pero sí ha alertado del aumento de la tasa de temporalidad hasta el 22%, por lo que ha definido como reto conseguir empleo estable y de calidad.
DÉFICIT
Según BBVA, Catalunya necesita reducir gasto respecto a 2016 para cumplir el objetivo de déficit de 2017 (del 0,6%), ya que si los ingresos aumentan al ritmo del PIB nominal y se congela el gasto, tendría un déficit superior al 0,9% del PIB.
El informe calcula que la incertidumbre sobre el cumplimiento de los objetivos de déficit puede restar cinco décimas al crecimiento de España en el bienio 2016-2017, aunque Doménech ha asegurado que "todavía hay margen para mejorar la eficiencia de las administraciones públicas en España y avanzar en la consolidación fiscal".
Ha agregado que la deuda no ha caído lo suficiente en las administraciones públicas cuando se augura un escenario de subida de tipos de interés, lo que supondría mayor carga para las cuentas públicas porque "no se están aprovechando los años de crecimiento para reducir el endeudamiento más rápidamente", restando recursos que ha calificado de muy necesarios para otras políticas de inversión y sociales.
"Si hacemos las cosas bien podemos crecer a niveles de los dos últimos años, al entorno del 3%", ha aseverado respecto a la influencia que puede tener en la economía una gestión adecuada de las incertidumbres.