La juez de la AN que investiga la sedición autoriza la incautación de la documentación que los Mossos querían quemar

La policía catalana asegura que es una "práctica habitual", aunque en su comunicado no aclara si eran papeles relacionados con el 1-O

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MADRID/BARCELONA, 26 (EUROPA PRESS)

La juez titular del Juzgado Central de Instrucción número 3 de la Audiencia Nacional, Carmen Lamela, ha sido la encargada de autorizar a media mañana que la Policía Nacional se lleve y analice la documentación de la furgoneta de los Mossos d'Esquadra que ha sido interceptada cuando trataba de acceder a una incineradora en Sant Adrià del Besòs (Barcelona), han informado a Europa Press fuentes jurídicas.

Fuentes policiales han explicado que los mossos han accedido, sin mostrar resistencia, a que la Policía Nacional se incaute de la documentación que trataban de quemar en la incineradora Tersa que hay en la localidad de Sant Adrià. A primera hora de la mañana, tras ser interceptado el vehículo, se negaron a desprenderse del material, alegando que no había orden judicial.

Dicha orden judicial ha sido remitida desde la Audiencia Nacional y ahora la Policía analizará si la documentación que se trataba de quemar es relevante para las investigaciones judiciales abiertas en relación con el desafío independentista y la celebración del referéndum ilegal del 1 de octubre.

La juez Lamela es la magistrada que ordenó el ingreso en prisión de los presidentes de la Asamblea Nacional de Cataluña, Jordi Sánchez, y de Òmnium Cultural, Jordi Cuixart.

En el marco de la investigación por un delito de sedición, también ha tomado declaración en dos ocasiones al mayor de los Mossos, Josep Lluís Trapero, y a la intendente Teresa Laplana por las protestas tumultuarias en contra de los registros llevados acabo el 20 y 21 de septiembre en dependencias de la Generalitat.

Fuentes policiales han asegurado que, tras un primer momento de confusión, los agentes de los Mossos han quedado a la espera de que llegara la orden judicial, sin mostrarse violentos ni agresivos. En ese intervalo de tiempo, una veintena de agentes de la Unidad de Intervención Policial (UIP) ha formado un cordón policial para impedir el acceso tanto a la incineradora como a la furgoneta.

La Policía Nacional se ha personado en la incineradora Tersa al objeto de impedir la posible destrucción de pruebas. La Audiencia Nacional ha autorizado que la Policía Nacional abra la furgoneta y compruebe qué mercancía lleva y, en el caso de que sea documentación, que la misma sea analizada en dependencias de este Cuerpo.

COMUNICADO DE LOS MOSSOS

Tras la incautación de la documentación, los Mossos d'Esquadra han hecho público un comunicado en el que defienden que es una práctica "ordinaria y habitual" destruir documentación. Según la policía catalana, los papeles trasladados a la incineradora era documentación administrativa relacionada con miembros de la policía catalana.

En su comunicado añaden que también hay "informes policiales y documentación diversa", sin aclarar si está relacionada con el desafío independentista investigado por la Audiencia Nacional y diferentes jueces en Cataluña.

La policía catalana ha añadido que toda la documentación oficial que se destruye se guarda en soporte digital y que, al no disponer de infraestructura propia en dependencias policiales para destruir esta documentación --que por motivos de seguridad y espacio no se puede guardar en soporte papel--, los Mossos hace años que llevan a cabo esta práctica en esta incineradora de Sant Adrià.

Al llegar a la incineradora, diversos efectivos de la Policía Nacional, que ya estaban allí, han exigido a los mossos que le entregaran la documentación, pero un mando de la policía catalana les ha contestado que sólo la podían entregar con autorización judicial.

Finalmente, tras llegar la autorización de la Audiencia Nacional, los Mossos han accedido a que la Policía Nacional se lleve la documentación, con lo que los agentes de este segundo Cuerpo policial la han metido en sus coches.