Alicia Torra reivindica la apertura de la abandonada Sala Granados como sala de conciertos
BARCELONA, 12 Dic. (EUROPA PRESS) - El presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, ha ensalzado este lunes la "elevación espiritual" del compositor y pianista leridano Enric Granados, al que ha descrito como un catalán universal, en el acto institucional conmemorativo del Any Granados en el Palau de la Generalitat.
Puigdemont ha aplaudido de Granados su vinculación con la tradición a la vez que su vocación de modernidad de la mano de los movimientos estéticos de su tiempo, como también hicieron otros destacados creadores como Pau Casals, Ramon Llull y Ramon Casas, ha dicho.
Ha destacado la importancia de que "un país honre a sus hijos más distinguidos, que han ayudado a elevarse espiritualmente y no materialmente", ya que se trata de personas que tenían vocación de trascendencia con su obra.
"Estas personas hacían un país elevado espiritualmente", ha recalcado, diciendo que si hubiera una banda sonora para el Modernismo, la música de Enric Granados tendría gran importancia en ella.
ACADEMIA GRANADOS
A propósito de la Academia Granados --actualmente Academia Marshall fundada por Granados--, la hija de la heredera de este centro Alicia de Larrocha, Alicia Torra, ha recordado que Granados fue además de pianista y compositor, maestro, y ha glosado la trayectoria de esta academia "referencia cultural" en la Barcelona de los años 40 y 50.
Torra ha aprovechado su discurso para lanzar una reivindicación y "rescatar del abandono y el olvido" la Sala Granados, situada en la barcelonesa avenida Tibidabo número 18, donde está deteriorándose sin que ni su propiedad, Reale, ni las administraciones hagan nada, ha lamentado.
"¿Dónde está el interés para salvaguardar la cultura de nuestro país? ¿Dónde están las instituciones para intentar negociar? ¿Dónde está la necesaria ley de mecenazgo?", ha lanzado a las autoridades, terminando su intervención pidiendo salvar esta sala sugiriendo que vuelva a ser una sala de conciertos.
En respuesta a esta reivindicación, Puigdemont ha asegurado que la celebración de esta efeméride debe servir no para tener un inicio y un final, sino para dar mayor presencia internacional a estos creadores, así como "coger el reto de Alicia Torra", ya que una de las voluntades de las conmemoraciones es que permiten abrir la puerta a hitos difíciles.
No obstante, ha dicho a los familiares, a los que ha descrito como depositarios de tesoros patrimoniales pertenecientes a la construcción de la identidad colectiva, "que sepan que hay instituciones preparadas para acoger los legados" y magnificar y dar la dimensión justa a éstos.
De entre los seis hijos que tuvo Granados, el nieto Enrique Granados ha agradecido el acto de reconocimiento al pianista, y ha recordado que su tía Natalia "estaba enamorada de su padre" y guardaba mucha documentación sobre el músico, un romántico, ha defendido.
El conseller de Cultura, Santi Vila, ha celebrado que revisitar a Granados permite descubrir a un "personaje extraordinario muy vinculado a la sociedad de su tiempo", y ha mostrado su esperanza de que éste sea el primer acto de un bienio conmemorativo de celebraciones académicas y culturales.
El alcalde de Lleida y presidente de la Comisión Any Granados, Àngel Ros, ha señalado la importancia de este acto de homenaje a un compositor de importancia "catalana, española y universal", ya que fue un referente de la talla de Jean Sibelius y Béla Bartok.