BARCELONA, 23 Ene. (EUROPA PRESS) -
El presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, ha asegurado este domingo que convocará el referéndum con o sin pacto con el Estado y ha expuesto que así lo transmite en los contactos que mantiene con diplomáticos que se interesan por la situación de Catalunya.
"Es lo que quiere la mayoría de la gente. En el caso de que el pacto no se haga, el referéndum se hará. Está todo el mundo avisado", ha explicado en el programa 'Jo pregunto' de TV3, donde ha respondido a las preguntas que le han formulado varios ciudadanos.
Puigdemont ha asegurado que los diplomáticos con los que se reúne no entienden "el inmovilismo" del Gobierno central, y ha garantizado que en ningún momento ha negociado secretamente con el Estado una salida al proceso soberanista que no sea el referéndum.
Se ha mostrado convencido de que la comunidad internacional entiende de manera "casi unánime" que Catalunya quiera celebrar un referéndum, y es por este motivo que convocará esta votación en el mes de septiembre de este año como muy tarde.
Ha insistido en que no repetirá como candidato a la Presidencia de la Generalitat y afirma de que podrá convocar el referéndum pese a que el Estado ponga trabas: "Si no hacemos el referéndum y no tomamos decisiones es que hemos fracasado. Mi propósito es que no fracasemos".
El presidente ha explicado que no hay fecha para verse con el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, pero ha asegurado que sus respectivos equipos trabajan para encontrarla: "Estamos buscando una fecha. Hay voluntad" por las dos partes, ha asegurado.
3.300 TRATADOS INTERNACIONALES
El único detalle que ha deslizado sobre la organización del referéndum es que podrán votar aquellas personas que pudieron hacerlo en el censo que se cerró la última vez que se votó, lo que deja fuera a los extranjeros, y ha argumentado que el referéndum tiene que cumplir con los "estándares" internacionales.
También ha explicado otro detalle sobre si vence el 'sí' en esta votación: la Generalitat ya ha contabilizado que Catalunya debería "transponer 3.300 tratados internacionales" que ha suscrito España y que un eventual Estado catalán debería incorporar a su ordenamiento jurídico.
RENTA GARANTIZADA
El presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, ha defendido las bondades de los Presupuestos de 2017 antes de encarar una semana decisiva para su aprobación: el Govern y la CUP tienen previsto cerrar esta semanas las negociaciones, y se ha mostrado "convencido" de que prosperarán.
"Hemos superado todas las pruebas de estrés del proceso. Estoy convencido de que también superaremos los Presupuestos. Estamos en el último tramo --del proceso-- y no nos podríamos permitir aquello que no nos hemos permitido hasta ahora: fallar", ha concluido.
En sanidad, por ejemplo, Puigdemont ha defendido que las cuentas "priorizan aquello que es más urgente corregir" como combatir les listas de espera, la salud mental, o la inversión en infraestructuras sanitarias, mientras que en educación ha asegurado que priorizan, por ejemplo, los centros de alta complejidad.
"No estamos al nivel de inversión educativa o cultural que consideramos como óptima. Tenemos una carencia, por esto nos rebelamos contra este sistema", ha proclamado Puigdemont, que considera que el problema de Catalunya es no tener una hacienda propia, no los Presupuestos que ha presentado.
Puigdemont ha explicado --la primera vez que el Govern lo hace en público-- que una de las demandas que hace la CUP y que el Govern acepta es que los Presupuestos de 2017 incluyan una partida para una Renta Básica Garantizada.
Según ha explicado el presidente, en un plazo de implementación progresivo de tres años, esta renta sería de 660 euros para el primer miembro de la familia; la mitad para el segundo, y 75 euros para cada hijo a cargo: "No nos separa tanto la cantidad sino el modelo", ha detallado.
NO HABRÁ CONSULTA DE BCN WORLD
En el debate ha aparecido multitud de temas que han posicionado al presidente como un defensor del modelo educativo actual de escuela pública y concertada, y también para revelar que el Govern cierra la puerta ya por completo a una consulta ciudadana sobre BCN World, el complejo ahora llamado Centro Recreativo Turístico (CRT), ya que considera que ya hay "consenso" sobre el tema.
El contacto con los ciudadanos ha generado varias anécdotas, como el ciudadano que le ha reprochado que el partido del presidente, el PDeCAT, quiso derribar el teatro de Manresa (Barcelona) donde se ha celebrado el programa y el presidente ha respondido con ironía: "Para quererlo derribar lo han dejado muy bien".