Cada año obtuvo con el tráfico de personas chinas y la explotación sexual unos 10 millones
BARCELONA, 2 Jul. (EUROPA PRESS) -
La red china desmantelada por la Guardia Civil con la detención de 17 miembros forzaba a las prostitutas a drogarse y a vender drogas a los clientes, las mantenía encerradas en apartamentos bajo su control y pudo obtener anualmente unos 10 millones de euros con el tráfico de personas.
Según ha informado Europol, que dio apoyó en las investigaciones y en la operación, los 17 presuntos miembros de esta red criminal china están involucrados con el contrabando de inmigrantes irregulares procedentes de China a España, que después se derivaban al Reino Unido, Suiza y Canadá.
La red, que actuaba en España desde 2011, proporcionaba a los inmigrantes chinos documentación falsa a su llegada al país y les reclamaba unos 30.000 euros por el viaje y la gestión de los papeles falsos.
En la operación desarrollada este martes en Barcelona, Badalona y Santa Coloma de Gramenet (Barcelona) participaron unos 200 agentes de la Guardia Civil, el Servicio de Inmigración del Reino Unido, con el apoyo de Europol, y se hicieron 11 registros.
En las entradas se ha encontrado dinero en efectivo, teléfonos móviles, pasaportes falsos, dispositivos informáticos, documentación y registros contables de empresas.
Según fuentes cercanas al caso, los agentes de la Guardia Civil liberaron a una veintena de mujeres que eran obligadas a ejercer la prostitución en pisos.
Se les atribuyen delitos de tráfico de seres humanos, tráfico de inmigrantes, falsedad documental y contra la salud pública.
Europol desplegó en la zona a un experto y una oficina móvil para dar apoyo a la operación analítico sobre el terreno con controles cruzados de todos los datos recogidos en el terreno.